El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, ordenó la noche de este miércoles que se inicie “una revisión integral de las relaciones con Estados Unidos”, tras conocerse que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) espió la vida privada de 10 mil trabajadores de Pdvsa durante 10 años.
El jefe de Estado comisionó a la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, para que este jueves cite al encargado de negocios de EEUU en el país y le haga entrega de una nota de protesta, por el agravio contra la nación latinoamericana.
Detalló durante un acto en el estado Anzoátegui que las pruebas las dio a conocer el ex agente de la CIA (Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos), Edwar Snowden, así como otros agentes de la NSA.
“Estos documentos han develado que los Estados Unidos y sus agencias de inteligencia y la Embajada de los Estados Unidos en Caracas, durante 10 años estuvieron espiando la vida privada de 10 mil trabajadores de Pdvsa”, confirmó.
Precisó que los agentes espiaron conversaciones de correos electrónicos, actividades diarias, así como los trabajos realizados por Pdvsa, industria que representa el pilar de la economía venezolana.
“El imperio Estadounidense desde hace tiempo, desde que (Hugo) Chávez la nacionalizó, ha tendido la intensión de la sabotear la industria petrolera”, denunció el Mandatario.
Alertó que si el imperio norteamericano, hipotéticamente, lograra derrocar al Gobierno Bolivariano, lo primero que haría es apropiarse del petróleo que es del pueblo de Venezuela.
VIOLACIÓN DEL DERECHO INTERNACIONAL
Sentenció que el imperio está acostumbrado a espiar al mundo, tal como lo han hecho con países de Europa como Alemania, al igual que también lo han hecho con Brasil. “¿Nos vamos a dejar nosotros?, ¿Venezuela se va dejar frente al imperialismo?”, se preguntó.
Maduro apuntó que en los próximos días anunciará las decisiones que tomará, “para que el gobierno de los Estados Unidos le pida perdón al pueblo de Venezuela por este agravio que ha cometido”.
Sentenció que se trata de una acción ofensiva que viola el Derecho Internacional, pues ningún país tiene el derecho de intervenir en los asuntos internos de otra nación.
“Los tiempos de los imperios, los tiempos de las colonias tienen que ser tiempos pasados y Venezuela tiene que ponerse de pie, defender su soberanía y su derecho a la dignidad”, puntualizó el presidente Maduro.
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