Trabajadoras residenciales rechazan amenazas de despido de condominios

Un grupo de trabajadoras residenciales acudió ayer a la sede administrativa de la Asamblea Nacional Constituyente, en el edificio La Francia, para denunciar que han recibido amenazas de despido de juntas de condominio y conjuntos residenciales bajo el argumento de que no pueden asumir el aumento salarial anunciado para todos los trabajadores y trabajadoras como parte del programa de recuperación económica y de reconversión.

Lideradas por Nélida Cordero, quien fungió como vocera, un grupo de unas 100 mujeres se presentó en el centro capitalino, a un costado de la plaza Bolívar, portando pancartas y lanzando consignas relacionadas con el respeto a la ley que protege al sector de trabajadoras residenciales. Una representación de ellas fue recibida por constituyentes, a quienes les entregaron un documento, especie de manifiesto, con peticiones, entre ellas la solicitud de apoyo y protección. Otro documento fue llevado al Ministerio del Trabajo y un tercero a la Vicepresidencia de la República.

Nélida Cordero se presentó como vocera nacional del Movimiento de Pobladores y de la organización de Trabajadores y Trabajadoras Residenciales Unidos por Venezuela.

“Hoy estamos aquí porque ha habido un despido masivo de trabajadores residenciales. Como a nosotros nos incluyeron como beneficiados del salario mínimo, los patronos señalan que no van a poder pagarlo. Argumentan que no tienen con que cancelarnos, que no van a vender sus casas para pagarnos a nosotros. De manera irregular nos están solicitando no una calificación de despido, como lo hace cualquier patrón, sino que ‘te vas ya, hasta el último, porque no tenemos con qué pagarte. Veremos qué vamos a hacer, pero tú te tienes que ir de aquí”, contó la señora Nélida Cordero.

Informó la mujer que la mayoría de los presentes habían recibido la notificación de que “te tienes que ir. Tú Gobierno que te busque tu vivienda”. Precisó que eran 73 personas las amenazadas con despidos.

Recalcó Nélida Cordero que no se irán porque no hay justificación para el despido. Explicó que las juntas de condominio, dominadas por una mentalidad feudal, estaban acostumbradas a que el trabajador residencial les hacia de todo: atender la electricidad, arreglar el ascensor, incluso hacer de vigilante.

Sin embargo, a raíz de la promulgación de la ley que protege a trabajadoras y trabajadores residenciales, llamados antiguamente conserjes, se logró dignificarlos como trabajadores y normar sus responsabilidades y espacio de trabajo. Gracias al comandante Chávez se lograron tales beneficios.

“Somos las trabajadores que hacemos el aseo y la limpieza de las áreas comunes. Eso no les gusta a ellos. Quieren que volvamos atrás. Estamos aquí para dar la batalla. Se lo decimos, así como nos han declarado la guerra, edificio donde se intente sacar a la trabajadora residencial, lo tomaremos, y las instituciones tienen que hacerle seguimiento al pueblo”, declaró la vocera, quien informó que en Caracas están agrupadas unas 500 trabajadoras residenciales, mientras que en todo el país serían unas tres mil.

Señaló Nélida Cordero que contaban con un enemigo común llamado Mi condominio.com, abocado a las juntas de condominio, que les ha declarado la guerra.

“Elías Santana nos ha declarado la guerra desde que nosotros nos organizamos. Nosotras decimos: déjenos trabajar. Usted organice su gente y nosotras nos organizamos como nos enseñó Chávez. Y aquí estamos, presidente Nicolás Maduro”, señala.

Dijo Cordero que con la normativa legal que rige su trabajo reciben los beneficios de ley: cestaticket de alimentación, ocho horas de trabajo y días libres. Recalcó que son trabajadores igual que el resto.

Ana María Valero, con 12 años laborando en el edificio Vesubio, contó la humillante experiencia vivida el día en que el presidente Maduro anunció el programa económico: pusieron una porción de excremento en la entrada de la conserjería.

“Me dijeron que la limpiara, que para eso se me pagaba. El lunes se reunieron y me dijeron que yo estaba despedida. Yo no he formado nada. Estamos convocadas para ir a la ANC, al Ministerio del Trabajo, para que se respete lo que nos aprobó nuestro Comandante de que nosotros éramos trabajadoras residenciales y se nos respete el sueldo. Yo limpio los pasillos, las escaleras, saco la basura. Trabajamos ocho horas diarias. Antiguamente el trato era bueno, ahora casi ninguno me dirige la palabra. Son 15 inquilinos. Yo vivo ahí con dos niños. Antiguamente trabajábamos hasta el sábado, a veces nos paraban hasta las doce de la noche a atender a alguien, no respetaban el horario. Los sábados teníamos que trabajar por si se presentaba un problema, ver las bombas, los ascensores, atender todo”, relata Valero.

Antes de reunirse con la ANC, Nélida Cordero leyó un documento que recoge los planteamientos de los trabajadores residenciales y puntualiza su apoyo al presidente Nicolás Maduro.

T/ Manuel Abrizo
F/ Gustavo Frisneda

El centro de la ciudad recupera su habitual dinamismo

Caracas recobra su ritmo al son de las buenas noticias

Los anuncios diarios con noticias positivas de un país esperanzado y de infinitas posibilidades desmienten la matriz de opinión negativa que se trata de imponer en las cadenas de noticias nacionales e internacionales

Mientras un sector de la prensa opositora y los medios internacionales buscan imponer la matriz de un país sumido en la hambruna “por culpa del comunismo” y la “aventura socialista”, con imágenes de un éxodo masivo de jóvenes que caminan desorientados por una playa solitaria en Perú o Ecuador, el presidente de la República Nicolás Maduro anuncia que los venezolanos (pensionados, amas de casa, trabajadores) podrán ahorrar comprando minúsculas piezas de oro, el ministro de Hábitat y Vivienda informa de la vivienda número dos millones y picote construida, y el presidente de Pdvsa firma un día convenios con el primer ministro de Trinidad y Tobago para la exportación de gas y al otro día suscribe un acuerdo con empresas extranjeras para elevar la producción petrolera.

Paralelamente se anuncia que más de 3.400.000 niños, niñas y adolescentes han disfrutado del Plan Vacacional Comunitario 2018 en todo el territorio nacional, según informó el viceministro para Masificación Deportiva, Arnaldo Sánchez. Mientras, en la Casa Bicentenario, el legendario Trío Venezuela cerró este miércoles una memorable presentación, en el contexto del programa Caracas, ciudad del son, con el tema “Magia blanca”, con el cual hechizó a toda la audiencia. No hay duda de que la pesada atmósfera de pesadumbre que gravitaba sobre los venezolanos y caraqueños se ha ido desvaneciendo a medida que pasan los días. El dinamismo que se observa en las calles, plazas y parques de Caracas es un claro testimonio de que el país encontró al fin una luz al final del túnel.

En las vacaciones escolares, los jóvenes han recorrido más de 13 mil espacios en todo el país, asistidos por los promotores deportivos, movimientos de recreadores y personal del Instituto Nacional de Parques (Inparques), entre otros. Ello explica la presencia constante de niños,niñas y jóvenes en los parques y plazas de Caracas entonando canciones y despejando acertijos entre juegos grupales.
La Casa del Bicentenario, en el casco central de la capital, abrió sus puertas ayer para realizar una nueva «Confe-rumba» en el marco de la exposición Caracas, ciudad de son, esta vez con una velada dedicada a los boleros para el disfrute los abuelos, abuelas, jóvenes, niñas y niños, según reportó AVN.

El evento estuvo dedicado a los protagonistas de «esa otra historia de Caracas», los músicos empíricos de las comunidades, especialmente quienes cultivan desde hace décadas este género latinoamericano del bolero.

Según la reseña sonaron piezas emblemáticas de varias épocas en las voces de maestros de este género, entre ellos la cantante Jacki Luna, con temas como “Motivos” y “Perdón”, en compañía de Pedro Palacio.

En el recinto, entre tambores, guitarras y la emoción de recordar las épocas de oro de la música, no se hizo esperar el baile que encanta a los caraqueños de todas las edades.

Durante el concierto, personalidades de la música estuvieron presentes y compartieron escenario con la agrupación Trío Venezuela, entre ellos los familiares del fallecido Luis “Tata” Guerra, una figura emblemática de la historia de este género musical.

Se recordaron personajes que le dieron fama a este ritmo caribeño, entre ellos Gustavo Monsalve, Joseito Fernández Guanta, Trío Matamoro, José Rosario Soto, entre otros.

Y como parte de esta actividad cultural, el Centro Nacional de Historia hizo un llamado a los ciudadanos a participar en los eventos programados para los meses de septiembre, octubre y noviembre, y de igual manera a inscribirse en un concurso de baile al ritmo de la salsa y el guaguancó, que se llevará a cabo a propósito de la exposición.

La posibilidad de ahorrar en oro, anunciada por el presidente Maduro, cayó como un balde de agua sobre las cabezas de los agoreros de siempre, las ánimas en pena que andan profetizando calamidades, sobre todo para hacerle el coro a la conjura internacional que procura a troche y moche mostrar un país en descomposición que requiere de la caridad internacional para aliviar las penurias de un pueblo que sufre.

En el Palacio de Miraflores, el ministro Jorge Rodríguez dijo que el plan que busca potenciar la cultura del ahorro con una moneda con un valor real en el mercado internacional y que se iniciará el próximo 11 de septiembre, permitirá que los venezolanos puedan respaldar y proteger sus ahorros e inversiones.

T/ Manuel Abrizo
F/ Gustavo Frisneda, Luis Franco
Caracas