Las trabajadoras y trabajadores, obreros y directivos de la DEM (Dirección Ejecutiva de la Magistratura) rindieron un homenaje póstumo a Gabriel Pérez Gil, director general de Servicios regionales de esa institución, quien fue asesinado el pasado fin de semana en un sector del 23 de Enero.
Aquí presentamos textualmente un escrito realizado por sus compañeros de labores:
“El Poder Judicial está consternado. Los trabajadores y trabajadoras de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura sentimos un profundo dolor. Ayer, en horas de la madrugada, en la parroquia 23 de Enero, asesinaron al Abg. Gabriel Pérez Gil, de 32 años, director general de Servicios Regionales de la Institución, luchador revolucionario, líder de su comunidad y trabajo, quien daba todo y más por sus ideales de libertad, igualdad y solidaridad.
Expresamos el más grande repudio a la violencia y rechazamos el asesinato como método aberrante. Es momento de denunciar, de pronunciarnos con fuerza, de actuar guiados por la razón y la inteligencia para frenar este río de sangre. Recordemos algunas muertes recientes.
En 2014, asesinaron a Eliécer Otaiza, presidente de la Cámara Municipal de Caracas. Su asesinato coincidió con el escenario de la segunda etapa de «La Salida», después de que se le había creado la matriz de opinión, a través de la página de Dólar Today, de que dirigía un comando criminal desde los colectivos. También a Robert Serra, diputado de la AN, le quitaron la vida. Fueron paramilitares, se pudo comprobar.
A principios de este año, de igual manera, Ricardo Durán, jefe de prensa de Distrito Capital, fue víctima del sicariato. Como dato curioso, venía investigando las fallas de Corpoelec habiendo demostrado la implicación de factores de la derecha como promotores de ellas. Hace poco el activista de la comunidad de inmigrantes haitianos en Venezuela, Fritz St. Louis, cayó a manos de quienes sirven a intereses injerencistas, macabros. Le han seguido otros. Luchadores todos.
A lo anterior se suma que hace unos días la editorial del Washington Post estuvo dedicada a Venezuela. En ella, se decía que nuestro país “requiere desesperadamente una intervención política”. Hagamos memoria. ¿Cuál fue el paso previo a la invasión a Irak y Libia? ¿Y recientemente qué pasó con Siria? Se acusó a sus gobiernos de dictatoriales, de constituir una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos. El objetivo, saquear sus riquezas, su petróleo, oro y demás. Eso es lo que quieren con Venezuela, geográficamente más cerca; por ello más apetecible.
A la par, nuestro continente es víctima de una agresión imperial. Hace solo unas horas, dieron un golpe parlamentario en Brasil. Acusaron de corrupta a su presidencia, Dilma Roussef, y no hay prueba alguna de ello. Curiosamente, quienes la incriminan sí están inmersos en actos de corrupción. En resumen, es el mismo guión, que no quepa la menor duda.
Al mismo tiempo, a manos de sicarios, militantes de Revolución Bolivariana son vilmente asesinados. Ayer mataron a Gabriel, nuestro compañero, pero, como decía nuestro Alí Primera, “Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos”. Seguiremos en pié de lucha.