Decenas de trabajadores del puerto de Haifa, en el norte de los territorios ocupados palestinos, iniciaron este lunes una severa huelga en protesta por los planes del régimen israelí para vender la totalidad o parte de varias empresas a sectores privados.
«Los trabajadores estaban enojados por el plan de privatización y decidieron salir a protestar» ha anunciado Yaniv Levy, portavoz de la organización israelí de sindicatos, Histadrut.
En este sentido, David Castillo, vicepresidente ejecutivo de la cámara marítima y portuaria israelí, afirmó que no está claro cuándo se levantará el paro y ha advertido de que «cada hora de huelga causa graves daños en las exportaciones y las importaciones israelíes».
El ministerio de finanzas israelí informó el domingo un programa para vender las acciones de varias empresas, incluidos el servicio postal y las empresas Israel Military Industries Ltd (IMI) e Israel Electric Corp (IEC).
El régimen de Tel Aviv, con esta venta, espera obtener unos 15 millones de shekels (4 mil millones de dólares), según el ministerio.
El ministro israelí de medioambiente, Amir Peretz, ha instado este lunes a las autoridades del régimen a reconsiderar el plan. «Ahora es momento de tener una discusión más amplia con el público sobre la propuesta de privatización, pues necesita ser abordada con mayor cautela», ha añadido Peretz.
Cabe señalar que el régimen israelí siempre ha enfrentado protestas y huelgas contra las malas condiciones laborales, entre ellas bajos salarios, discriminación de todo tipo, así como la falta de seguridad del empleo, lo que demuestra la crítica situación económica en los territorios ocupados palestinos.
El pasado abril, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en un informe, señaló que los territorios ocupados por el régimen de Israel abarcan una de las poblaciones más pobres, 20,9 % del total de los que viven esa zona.