Este jueves|TSJ anuló sentencia en caso de Fabricio Ojeda

La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) anuló este jueves la sentencia dictada el 26 de agosto de 1966, en el caso del fallecido periodista, maestro y diputado Fabricio Ojeda.

En este sentido, el magistrado Juan José Mendoza Jover declaró a lugar la revisión constitucional solicitada por los abogados Juan Carlos Tabares Hernández, Espartaco Martínez y Alba Martínez Geara.

De acuerdo con una nota divulgada por el TSJ, el máximo organismo judicial declaró terminada la averiguación sumaria iniciada con ocasión de la muerte de Fabirico Ojeda, en virtud de no revestir carácter penal los hechos de la referida averiguación.

El Magistrado ordenó oficiar a la jefa de la Oficina de Archivo Judicial del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, para que, dentro de los 10 días siguientes al recibo de la respectiva notificación, y a los fines de la continuación de la investigación correspondiente, remita a los prenombrados representantes del Ministerio Público, comisionados en el presente caso.

Este jueves se conmemoran 46 años de la muerte de Fabricio Ojeda, quien fue asesinado tras ser detenido y torturado por el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (Sifa), que respondía a las órdenes del presidente adeco Raúl Leoni.

A finales de 1962, Ojeda fue detenido y sentenciado por un Consejo de Guerra a 18 años de presidio por rebelión militar. Pero recluido en la cárcel de Trujillo, logró fugarse en compañía de otros compañeros.

El 19 de junio de 1966, Fabricio Ojeda fue detenido en La Guaira, y dos días más tarde fue asesinado, reseña el libro Víctimas de la Democracia Representativa en Venezuela, de Raúl Zurita Daza.

Texto/AVN
Etiquetas

la tortura a hombres y mujeres en la cuarta república, fue instucionalizada,gobiernos asesinos serviles del imperio,si asesinar no revestí investigación,para TSJ significa que no hemos avanzado en lo judicial y estamos expuesto a cualquier zarpazo Fabricio ejemplo de valentía, coraje siempre vivirá en nuestro que hacer diario, algun día no lejano juzgaremos a tus ejecutores.