Un total de nueve títulos se exhibirán en la primera edición del Festival de cine holandés

Un total de nueve títulos se podrán apreciar durante la primera edición del Festival de Cine del Reino de los Países Bajos, una muestra de piezas creadas desde 3013 hasta 2017 seleccionadas con un criterio que, de acuerdo al embajador de esa nación en Venezuela, Norbert Braakhuis, se concentró tanto en la calidad técnica y artística de las producciones como en su diversidad, no solamente de géneros sino en cuanto al contenido de elementos que, en conjunto, articulan una panorámica de la cultura holandesa.

En una rueda de prensa realizada ayer para hacer públicos los detalles del evento se informó que la muestra tendrá lugar en Caracas, específicamente en los Cines Paseo del Trasnocho Cultural, desde hoy viernes 27 de octubre hasta el jueves 2 de noviembre, con entradas gratuitas para todas las funciones, que serán dos los días de semana, tres el sábado y tres domingo, siempre con títulos diferentes en cada horario.

EN MARACAIBO Y NUEVA ESPARTA

Está previsto que, en una versión reducida, la exhibición cinematográfica se traslade al Centro de Arte Lía Bermúdez, en Maracaibo, estado Zulia, desde el 11 de noviembre, durante cuatro días. Igualmente se espera que algunas de las obras que conforman este festival se proyecten en Nueva Esparta, en lugares y fechas aún por definir.

Para el embajador del Reino de los Países Bajos en Caracas, esta muestra permite concentrar una buena representación de la producción cinematográfica de su país, cuya calidad técnica y particularidades expresivas solo se han podido apreciar en Venezuela, hasta ahora, con escasos títulos sueltos que apenas han tenido minúsculos espacios en una cartelera dominada por la gran industria hollywoodense.

UN TOQUE AFRICANISTA

En el encuentro con los medios de comunicación social el director de programación de Cines Paseo señaló que si bien esta muestra responde a una selección realizada por el ministerio de Relaciones Exteriores del Reino de los Países Bajos, se ajustaron aquí algunos detalles para adaptarla aún más al público venezolano.

En este orden de ideas Norbert Braakhuis apuntó que algunas de las películas contienen historias ambientadas en lugares cercanos a Venezuela como Surinam, que hasta 1975 formaba parte del Reino de los Países Bajos, o Curazao.

Tal es el caso de El precio del Azúcar (2013), en la que el director Jean van de Velde relata una historia ambientada en la sociedad esclavista del Surinam de 1747, sobre dos hermanastras: una es blanca y la otra es esclava. Nominada como mejor película y mejor actriz (Yootha Wong-Loi-Sing) en el Nederlands Film Festival 2014.

Por su parte el documental La sombra del color (2014) , de Angela E. Roe, explora el impacto de la raza y el color de la piel en la sociedad postcolonial de Curazao.

El tema de la esclavitud, las conquistas y las relaciones interraciales también está presente en Tula: la revuelta (2013), del realizador Jeroen Leinderssobre, una pieza sobre el tráfico de esclavos en Curazao; y en Un Pueblo (1976) primera cinta rodada en Surinam después de su independencia, considerada un clásico del cine de ese país.

MANDELA PRESENTE

Como lo señaló Braakhuis, el toque “africanista” de este festival también está presente con el reciente largometraje de ficción Bram Fischer: un acto de desafío (2017), igualmente de Jean van de Velde, una d elas granes figuras de la dirección cinematográfica en Holanda, que en esta oportunidad tomó como base el libro El Estado vs. Nelson Mandela de Joel Joffe, inspirado en hechos reales, que relata la lucha del abogado sudafricano Bram Fischer contra el sistema de segregación racial conocido como apartheid, proceso en el cual le tocó el honor de defender nada menos que a al líder Nelson Mandela. Fischer fue galardonado con el Premio Lenin de la Paz en 1967.

DIVERSIDAD DE GÉNEROS

A esta serie de películas con temáticas de mucha seriedad a las que se suman, por ejemplo El Almirante (2015) un filme de Roel Reiné sobre parte de los orígenes de la conformación del Reino de los Países Bajos contenidos en la historia de Michiel de Ruyter (1607-1676), uno de los mayores innovadores en las tácticas de la guerra naval que se convirtió en un héroe de su país.

No obstante, la variada exhibición también incluye largometrajes para reír y disfrutar en familia, entre los que se cuentan, El maratón (2012), una comedia ligera de Diederick Koopal en torno a las vicisitudes de Gerard, Leo, Kees y Nico, cuatro amigos que trabajan en el taller mecánico con una deuda importante por impuestos no pagados. Ante esta situación se les ocurre correr el maratón de Rotterdam, a pesar de no reunir las condiciones físicas para hacerlo, con la idea de conseguir que un patrocinador apoye su participación y así salvar al taller de la bancarrota.

HOMANEJE A VAN GOGH

Completan la muestra una película sobre los derechos de la comunidad LGBTI, como lo es Strike a Pose (2016) y, quizás la joya d ela corona en esta exhibición, El legado de van Gogh (2013), de Pim van Hoeve, con la soberbia interpretación del británico Barry Atsma.

La primera es un documental en coproducción con Bélgica, dirigido a cuatro manos por Ester Gould y Reijer Zwaan. La particular pieza que es una suerte de documental sobre un documental refleja la historia de siete bailarines, seis de ellos gays que, tras participar en la película (documental) iEn la cama con Madonna, a quien acompañaron en la gira la gira Blond Ambition, se convirtieron en ejemplos que inspiraron a personas en todo el mundo a atreverse a ser quienes realmente son. Veinticinco años más tarde, los artistas que hicieron bailar a medio planeta con su «Vogue» cuentan cómo fueron sus vidas durante y después del tour con la Reina del Pop.

Por su parte, según la sinópsis El legado de van Gogh es una película biográfica en torno a a vida del famoso pintor Vincent van Gogh y la de su sobrino, el ingeniero Vincent Willem van Gogh. “Durante toda su vida Vincent Willem van Gogh, hijo de Theo van Gogh, ha albergado la colección de pinturas y dibujos de su tío Vincent y se ha sentido lastrado por este legado. En esos momentos espera poder librarse de ello para siempre, vendiendo la colección a algún museo. Su esposa le hace reflexionar sobre el asunto, pero él parece decidido de una vez y por todas a desembarazarse de la obra de aquel que ha marcado su vida personal para siempre”, menciona el resumen.

T/Luis Jesús González Cova
F/Jonathan Manzano
Caracas

 

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