El consejo de la Unión Europea aprobó la distribución de los refugiados provenientes de oriente medio, a pesar de la negativa de cuatro países. La decisión será adoptada por todos los miembros, independientemente de la posición que haya tomado cada uno de estos estados.
A pesar del voto negativo de los representantes de Eslovaquía, República Checa, Rumanía y Hungría y la abstención de Finlandia, serán relocalizados 120.000 refugiados entre todos los países pertenecientes a la unión europea en los próximos dos años.
La distribución se realizará en dos fases, la primera donde 66.000 personas serán movilizadas de forma inmediata y 54.000 en un tiempo aún no definido.
Al respecto el ministro de Luxemburgo, Jean Asselborn, se excusó aludiendo a que la decisión respondió a las críticas de falta de celeridad por parte de la instancia europea.
“La UE es acusada de lentitud, así que hoy hemos tenido que adoptar esta decisión para relocalizar a 120.000 personas…Si no, nuestra credibilidad hubiera sufrido aún más”. Expresó Jean Asselborn.
Durante la reunión se estableció la logística de traslado, donde explicaron que los refugiados serán trasladados desde Grecia e Italia, aunque indicaron que podrá incluirse otro país que así lo solicite y redistribuir la cuota estimada.
Según lo referido por las agencias europeas, el texto legal no menciona que las cuotas sean obligatorias pero si lo es su cumplimiento. Se espera que las cuotas sean acordadas el día de mañana cuando se realizará una cumbre de líderes europeos