En el marco del Primer Congreso Internacional de Comunicación se ofrecieron los primeros detalles de esta universidad que se estima de sus primeros paso en el 2020 y arranque formalmente en el 2021, y cuyo pensum debe basarse en la construcción colectiva del proceso de formación y comunicación
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Para la Universidad Internacional de la Comunicación es necesario recomponer toda la estructura epistemológica y que el pensum completo de estudios dependa y sea eje concreto de las luchas emancipadoras de nuestros pueblos , planteó el filósofo mexicano Fernando Buen Abad durante su participación en el “Congreso Internacional de Comunicación ¡Ahora hablan los pueblos !”, que se desarrolla en lo espacios del hotel Alba Caracas, organizado por el Psuv y que concluye hoy con la conclusión final .
Buen Abad, quien intervino en la mesa que debatió el tema “Universidad Internacional de la Comunicación/Fábrica de Contenidos”, estuvo acompañado por Gabriela Jiménez, ministra del Poder Popular de Ciencia y Tecnología”, y William Castillo, responsable de la política internacional comunicacional de la cancillería venezolana.
Abad abogó porque nunca más otros temas sacados del abstracto individualista, escapistas, del nihilismo “que nos domina tanto”, de ciertas corrientes que se infiltran en los individuos y se convierten en egos, vanidades, estén por encima de las batallas de los pueblos, y nunca las individualidades se pongan por encima de los movimientos populares.
Buen Abad criticó particularmente este periodismo de “anclas” y de figuras, que, por ejemplo, informan de lo que está pasando en Bolivia, pero para salir ellos en el video, sin dar cabida a los protagonistas de las luchas. “Eso que se llama arribismo mediático está ocurriendo ente nosotros”, señalo
El filósofo expuso, refiriéndose a la universidad, que tenemos que ejercer desde la formación práctica y teórica para evitar ese tipo de deformaciones (el arribismo mediático).
“ Ese es un eje importantísimo de análisis que hay que romper. No puede ser que el narrador esté por encima de los narrado. Es una disputa, un debate ideológico profundo (…) En este proyecto de la Universidad de la Comunicación que las luchas de los pueblos ocupen la agenda del pensum de nuestras tareas de comunicación,que sean las comunidades las que mandan y que ademas el militante, el compañero, el técnico que trabaja la comunicación, entienda que comunicar no es exhibirse él o el narrador estrella, no es mostrar su tecnología, lo que necesitamos todos es construir organización, la unidad y esa es una meta didáctica pedagógica, estética, política, de primer orden para esta universidad”, consideró.
Formación colectiva
La Universidad Internacional de la Comunicación, propuesta que surgió hace un par de años, entre toros por Buen Abad, dará sus primeros pasos, afirmó William Castillo, en el primer trimestre o semestre del 2020, con algunos programas formativos y de reconocimientos de saberes en alianza con otras universidades y centros de enseñanza. En el 2021 la universidad arrancaría formalmente con toda su estructura académica y jurídica. NO se rtata de crear una institución burocratizada, académica, anclada en los paradigmas de la andragogia.
William Castillo consideró que el proyecto de la universidad está basado en la posibilidad de crear sinergia, mecanismos de articulación, uso de tecnologías liberadoras que incentiven formas de comunicación colectiva que puedan circular por las redes.
El pan de formación será construido colectivamente, con instituciones académicas y no académicas. Se estima firmar convenios con universidades foráneas, en México, Argentina, Brasil, e incluso, incorporar financiamiento como el Plan de Becas Gran Mariscal de Ayacucho.
El modo de estudio podrá admitir formas en linea (on line), o presenciales y bajo el precepto de “educar haciendo”.. La universidad se propone romper el esquema de la educación tradicional por el de la formación colectiva. La universidad va a exigir productos académicos relativos a esas luchas de los pueblos.
“Vamos a alimentar la propuesta de nuevos paradigmas que va a implicar esquemas, procesos de información, con metodologías, con visiones abiertas, pero todas dentro de la base de una ruptura epistemoloǵica y conceptual con los modelos de enseñanza y formación dominante. Vamos a hablar de modelos presenciales y no presenciales. Debemos construir una plataforma y no es casual que hoy este la ministro de ciencia y tecnología”, dijo Castillo, quien consideró además que la comunicación parece estar reducida a un tema de tecnología, a tener un teléfono y conexión a internet.
“Han empobrecido el concepto a tener un plan de datos, a colocar tus fotos y parece que a eso se reduce la comunicación, o a la repetición reiterada, como dice Buen Abad, de esquemas mentales, de relatos, de posicionamiento político o simbólicos, que nos hacen participar en un mundo cada vez más comentado pero también más aislado”, señala Castillo.
En su disertación, Buen Abad hizo algunas consideraciones sobre las transnacionales y la industria de la comunicación y entretenimiento que juegan un claro papel en el dominio de la conciencia colectiva a través de mecanismo sutiles como las historietas de Walt Disney o como el caso del Chavo del 8, en el que los fortísimos golpes a un niño en la cabeza producen carcajadas y un niño, el Chavo, pasó 30 años vi viendo en un barril, sin recibir cariño y solidaridad.
Abad afirmó que en el mundo hay 6.500 medios de comunicación, los más importantes, de los cuales ocho dueños son los más influyentes del planeta, en un relacionamiento con el eje Israel-Norteamérica.
En el caso de la industria Disney afirmó que “le enseñan a sus guionistas un modelo narrativo, que es una estrategia de sintaxis con la que se cuenta la historia y se construyen los héroes. Los protagonistas, los antagonistas, el bien, el mal, la lucha y el desenlace. Esta estructura narrativa está regida por una especie de taller de sintaxis de la lógica narrativa de la empresa y con ese modelo se cuenta todo”.
Buen Abad dijo que la sola concentración monopólica de medios de comunicación, con esta cantidad de manipuleos internos de la conciencia social ya constituye una agresión contra los derechos humanos fundamentales y contra los pueblos”.