Patria Grande y socialismo | Las venas abiertas de Venezuela (Opinión)

La amenaza del decreto del presidente Barack Obama sobre Venezuela exige la mayor planificación, coordinación y efectividad en el cumplimiento de los objetivos del plan de la patria que se refieren a la eliminación y reducción a niveles no vitales del relacionamiento económico, comercial, tecnológico y financiero con Estados Unidos.

Esta debería ser una de las tareas centrales de los ministerios de las áreas de planificación, economía, ciencia y tecnología, industrias y alimentación, por citar las áreas más críticas.

Se trata de definir las áreas estratégicas y vitales para la soberanía nacional y tener en la mano a la brevedad el plan para diversificar el origen de la importación de bienes y servicios que actualmente provienen de Estados Unidos y de sus países aliados, así como tener los planes de producción y desarrollo científico y tecnológico en estas áreas vitales.

Las reuniones y conversaciones con nuestros países aliados y bloques regionales deberían incorporar esta dimensión de la defensa nacional en los distintos frentes posibles de agresión económica de Estados Unidos contra nuestro país.

Debemos estar preparados. No sería de extrañar que Estados Unidos tenga planeado poner en marcha algún tipo agresión económica contra el país, una vez que el Consejo Nacional Electoral diga la fecha de las elecciones legislativas, para influir en el resultado electoral.

En su recordado discurso antiimperialista, del 29 de febrero de 2004, el comandante Hugo Chávez le advirtió a George W. Bush lo que pasaría si se le ocurriera desplegar una agresión militar o alguna medida de bloqueo económico, no solo él advertía sobre la suspensión del envío de petróleo, sino también sobre embargos a las propiedades estadounidenses en el país. La situación ha cambiado, quizás, pero no tanto. ¿Estados Unidos puede ahora prescindir del petróleo diario de Venezuela? Quizás pueda, pero sigue teniendo más intereses y negocios en nuestro país, que nosotros allá en Estados Unidos. Esa es la otra cara de nuestra dependencia.

Debemos estar listos para cerrar las venas abiertas de Venezuela con Estados Unidos y consolidar la definitiva independencia.

T/ Mónica Saiz