Pese a los intentos de la ultraderecha nacional y las presiones del imperialismo estadounidense y sus aliados europeos, el país se encamina hacia la consolidación de esta herramienta impulsada por la diplomacia bolivariana de paz, como única vía para la solución de la compleja situación por la cual atraviesa el pueblo venezolano
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El proceso de diálogo en Venezuela se produce como una iniciativa del presidente Nicolás Maduro para la búsqueda de soluciones a la compleja coyuntura por la que atraviesa el país y para finalizar con la situación de golpe continuado impulsado por la oposición no democrática y el imperialismo estadounidense.
Desde que Nicolás Maduro asumió la Presidencia de Venezuela en 2013, ha hecho cerca de 300 llamados al diálogo para invitar a la oposición a trabajar en conjunto por el bienestar y la convivencia pacífica de todo el pueblo venezolano. Sin embargo, los sectores no democráticos enquistados en diferentes organizaciones de la derecha, impidieron hasta hace poco el desarrollo de esta herramienta para promover salidas violentas a la compleja realidad política.
Recordemos que en 2016, se realizaron varias reuniones exploratorias a las que siempre el Gobierno Bolivariano consideró importantes, mientras que los representantes de la hoy casi extinta coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se esmeraron en minimizar y desestimar. La MUD emitió varios comunicados fijando una posición adversa al diálogo tras participar en las conversaciones e incluso negarlo.
Este año, la ultraderecha apostó nuevamente por un plan insurreccional para aniquilar a la Revolución Bolivariana que dejó entre los meses de abril y junio cerca de 200 víctimas mortales y millones de dólares en pérdidas para la propiedad pública y privada.
El pueblo venezolano derrotó esta ola de violencia fascista, participando masivamente en la elección de una nueva Asamblea Nacional Constituyente (ANC) el 30 de julio, reafirmando su apoyo al diálogo, la democracia y la convivencia pacífica.
Desde mediados de junio del presente año, el Gobierno Bolivariano anunció que estaba trabajando para retomar el diálogo y dar continuidad a la posibilidad de un acuerdo nacional que permita recuperar la producción económica y la estabilidad política.
En septiembre, desde República Dominicana, durante la segunda reunión exploratoria entre las partes, el coordinador de la Delegación del Gobierno para el Diálogo, Jorge Rodríguez, recalcó que a pesar de las agresiones y el bloqueo contra el sistema financiero de la República Bolivariana de Venezuela, será el diálogo de paz el que se impondrá para solucionar los asuntos políticos y sociales de los venezolanos.
Y es que en medio de la búsqueda de la paz, nuestro país fue víctima de sanciones ilegales y de un bloqueo financiero que ha pretendido asfixiar las arcas del Estado y quebrar la industria petrolera.
Aun así, el diálogo siguió su curso avalado por el respaldo electoral que las mayorías le han dado a la Revolución Bolivariana no solo en la elección de la ANC, sino en los comicios regionales y municipales.
Proceso exitoso
El 1 y 2 de diciembre, el Gobierno Bolivariano y la oposición iniciaron una ronda de conversaciones formales en la sede de la Cancillería de la República Dominicana, con el acompañamiento de los cancilleres de México (Luis Videgaray); Chile (Heraldo Muñoz); Nicaragua (Denis Moncada) y Bolivia (Fernando Huanacuni).
Asimismo, el diálogo fue acompañado por el presidente dominicano, Danilo Medina; el canciller de ese país, Miguel Vargas; y el expresidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero.
En ese momento, la Cancillería dominicana reconoció en un comunicado que tanto el Gobierno como la oposición venezolana «han dado muestra de buena voluntad» para que avance el proceso, y «esperamos que las discusiones culminen de forma satisfactoria por el bien del pueblo venezolano».
En ese momento se fijó una nueva cita para el 15 de diciembre, tras producirse un nuevo evento electoral en el que el chavismo obtuvo un evidente triunfo y un respaldo contundente del electorado al obtener 305 de las 555 alcaldías en disputa en los comicios municipales.
Ambas partes destacan logros
Tras este nuevo encuentro, los medios internacionales resaltaron que tanto el Gobierno como la oposición destacaron los avances en esta nueva jornada en la capital dominicana.
El presidente de República Dominicana, Danilo Medina, anunció que el diálogo entre las delegaciones del Gobierno venezolano y la oposición tuvo grandes avances en los seis puntos discutidos y se retomará el próximo 11 y 12 de enero.
«Son seis grandes temas los que estamos discutiendo. Cada tema tiene un número de subtemas; hay que seguir discutiendo algunos técnicamente (…) no podemos anunciar los resultados hasta que no se llegue a un acuerdo sobre todo», explicó Medina, frente a la prensa internacional al salir de la reunión de diálogo en el Centro de Convenciones de la Cancillería, en Santo Domingo.
Por su parte, el canciller de México, Luis Videgaray, aseguró que observó seriedad en el proceso de negociación entre el Gobierno Bolivariano y representantes de la oposición. «Ambas partes se mostraron con seriedad a la altura del tamaño del reto que enfrenta Venezuela», dijo.
Asimismo, afirmó que “ambas partes han acordado tiempo y métodos para solucionar pacíficamente los problemas».
El canciller chileno, Heraldo Muñoz, reiteró que ambas partes negociaron seriamente sobre la base del documento que se les entregó en el diálogo anterior: «Son seis puntos complejos y fueron tratados, hay avances significativos aunque todavía queda trabajo técnico y es necesario un poco más de tiempo», sostuvo.
Muñoz manifestó que tienen «esperanzas que el próximo 12 de enero se finalice el acuerdo y se cierre el proceso».
«Hemos notado una voluntad de negociar seriamente, hay trabajo concreto, lo valoramos, no está terminado pero estamos cerca de la meta y por eso estaremos de vuelta en República Dominicana, para que los propios venezolanos lleguen a un acuerdo anhelado y a una pacífica salida», expresó.
El canciller de Nicaragua, Denin Moncada, aseguró que el diálogo sostenido fue «positivo y constructivo» y que ambas partes «están haciendo grandes esfuerzos para lograr una solución pacífica y aproximarse a acuerdos para lograr la paz y la estabilidad de Venezuela».
Nueva cita promete más logros
En esta oportunidad, las conversaciones se extendieron por casi nueve horas y las partes acordaron volver a reunirse en el país anfitrión el 12 de enero bajo el auspicio del presidente dominicano, Danilo Medina; y del exjefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, con el acompañamiento de Chile, México, Bolivia, Nicaragua, San Vicente y Granadinas.
El día 11 de enero se realizará una reunión de trabajo con dos comisiones y el 12 de enero se instalará nuevamente la mesa de diálogo con la presencia de todos los acompañantes internacionales.
En sus declaraciones a la prensa, el ministro del Poder Popular para la Comunicación y la Información y portavoz oficial de la delegación del Gobierno Bolivariano para este tema, Jorge Rodríguez, calificó de «constructivo» el diálogo en el que se ha avanzado en los seis temas de la agenda establecida.
«Hemos avanzado mucho. Las partes hemos establecido nuestra disposición de mantenernos en este proceso de diálogo que aún cuando es un proceso arduo nos han permitido avanzar bastante», expresó.
Explicó que los seis puntos de la agenda tienen, a su vez, «elementos complejos que deben ser atendidos, pero en todos ellos hemos logrado acercamientos importantes».
A su vez, señaló que no se trata de «reuniones para la retórica sino para la construcción de un acuerdo de convivencia democrática».
Por su parte, el dirigente opositor, Luis Florido, en representación del vocero oficial acordado, Julio Borges, aseguró que «el clima de discusión ha sido positivo y constructivo». Asimismo, pidió «un acuerdo que sea verificable y pueda cumplirse».
Reiteró que se avanzó en algunos temas y se efectuarán otras reuniones el próximo 11 y 12 de enero. «Continuaremos avanzado en una agenda del país y de todos los venezolanos, y sobre todo la responsabilidad en que estamos en este proceso», aseguró.
Persisten amenazas
En conclusión, el 2017 cierra con una exitosa jornada de diálogo en favor de la paz, con fecha de reinicio en enero de 2018. La consolidación de un clima de convivencia pacífica permitirá crear las condiciones para solucionar la problemática económica.
Sin embargo, las amenazas sobre el diálogo continúan, ayer el embajador de Venezuela en España, Mario Isea, pidió a ese país «reflexionar» sobre su intención de aplicar sanciones a personas venezolanas en territorio español, ya esto resulta contradictorio con el «clima de paz» y los esfuerzos a favor del diálogo que se están dando entre el Gobierno Bolivariano y al oposición.
«Es un contrasentido que se anuncien sanciones cuando estamos en un proceso de diálogo», afirmó Isea durante un encuentro con la prensa en la Embajada de Venezuela en Madrid, donde expresó la necesidad de «facilitar con más contundencia el diálogo», reseñan las agencias.
«No debería un gobierno democrático complicarse su credibilidad de esa manera, avalando comportamientos que no son claramente democráticos de actores en otros países», dijo Isea en referencia al apoyo que desde el Ejecutivo español se ha dado a algunos miembros de la oposición venezolana que han participado en acciones violentas y desestabilizadoras.
El diplomático insistió en que España «tiene muchas posibilidades de ayudar por los lazos que nos unen y coadyuvar a que en Europa, en vez de sanciones haya diálogo».