Este viernes, el Superintendente Nacional Antidrogas, M/G Richard López Vargas, participó en la Reunión de Jefes de los Organismos Nacionales Encargados de Combatir el Tráfico Ilícito de Drogas (Honlea), América Latina y el Caribe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd), de los órganos subsidiarios de la Comisión de Estupefacientes en formato virtual.
La máxima autoridad antidrogas del país abordó las medidas implementadas por el Estado venezolano ante la pandemia de la Covid-19 y su impacto en el tráfico ilícito de drogas y otras formas de delincuencia organizada, durante su intervención en la sesión de la Honlea celebrada en Viena.
Este foro de alto nivel fue presidido por Julia Villatoro, Embajadora de la República de El Salvador, ante Austria, y Misión Permanente ante la Oficina de las Naciones Unidas y Organismos Internacionales, con sede en Viena, Austria.
El Superintendente Antidrogas resaltó que con la llegada de la Covid-19 a tierras venezolanas, el Gobierno Bolivariano redujo como principal medida preventiva las actividades laborales en resguardo de la población, a excepción de sectores priorizados tales como: salud, alimentación y seguridad. Posteriormente flexibilizó áreas vitales como la economía y las vías de tránsito terrestre, bajo estrictas medidas de bioseguridad, para evitar un alza en los contagios dentro del país.
Analizó el comportamiento de los procedimientos antidrogas en el territorio nacional en el año 2020, que al inicio de la pandemia se reflejó una leve disminución durante los primeros meses de radicalización y luego un repunte de los mismos, alcanzando más de 3 mil procedimientos y 53 operaciones militares, y con ellos: casi 50 toneladas de droga y 357 toneladas de sustancias químicas incautadas.
En este periodo, más de 4 mil personas resultaron detenidas vinculadas al delito de tráfico, casi 80 laboratorios destruidos a escasos metros de la línea fronteriza con Colombia, más de 20 pistas no autorizadas fueron destruidas y 43 aeronaves que intentaban hacer uso del espacio aéreo venezolano para fines ilícitos se neutralizaron.
Dijo que se evidenció un cambio de modalidades de transporte y ocultamiento de las sustancias para el referido periodo, utilizando los paquetes de alimentos, frutas y verduras para el traslado terrestre de las mismas desde el occidente del país.
Con respecto a la data de los bienes incautados al tráfico ilícito de drogas, el Mayor General reveló un importante incremento en época de pandemia durante el 2020; sin embargo, fueron orientados para la ejecución de actividades preventivas (deportivas y/o culturales); la producción de alimentos para la población venezolana; la ocupación de espacios susceptibles de ser utilizados para fines delictivos y –paradójicamente-hasta para el traslado de insumos y pruebas relacionadas a las circunstancias de la Covid-19, expresó.
“En Venezuela se tiene una estricta política de prevención y seguimiento sobre el delito de legitimación de capitales; con lo cual, reafirmamos que nuestro sistema financiero no se beneficia del mismo”.
Señaló que la pandemia trajo como consecuencia en el territorio nacional, el uso de las redes sociales como: Facebook, Instagram y Twitter, para la venta de semillas de cannabis que una vez pagadas son distribuidas a través del servicio postal, y como respuesta ante esta problemática, el Mayor General recordó que en el Proyecto de Reforma de la Ley Orgánica de Drogas a la espera de la segunda discusión de la Asamblea Nacional, se prevé la incorporación de penas privativas de libertad para quienes hagan uso de las tecnologías de la información para este tipo de delitos.
Igualmente, el MG López Vargas ratificó la posición de Venezuela en pro del multilateralismo, la disposición para hacer frente a esta problemática, mejorar las medidas de prevención contra el tráfico ilícito y fortalecer la cooperación internacional bajo la responsabilidad común y compartida pero diferenciada de los pueblos.
En esta reunión que funge como un mecanismo de consulta regional, participaron los responsables de los países de América Latina y el Caribe, entre ellos, Venezuela, la cual tiene lugar cada año para fortalecer la cooperación y la coordinación regional e interregional de las actividades relacionadas con la lucha contra las drogas entre los Estados miembros.