Venezuela presenta propuestas a la ONU para la consecución de la Agenda 2030

Plantea la completa derogación de todas las medidas coercitivas unilaterales, la ampliación de la financiación de entidades bancarias multilaterales y regionales y un acuerdo de moratoria de los pagos de servicio de la deuda para todos los países en desarrollo

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El representante permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, reafirmó el compromiso del Gobierno Bolivariano con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, durante el Debate General de la Segunda Comisión de la Asamblea General realizado el jueves.

“La República Bolivariana de Venezuela, aun en medio de las dificultades resultantes de la peor pandemia en cien años, ratifica su firme compromiso con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, particularmente con el objetivo de lograr la erradicación de la pobreza en todas sus formas y dimensiones, incluida la pobreza extrema, siendo este el objetivo principal de nuestros planes nacionales de desarrollo. Y es que, para nuestro país, el no dejar a nadie atrás, más que una frase retórica es una política de Estado, tal como lo demuestran los múltiples programas sociales en curso”, señaló el embajador en la plenaria de la Segunda Comisión.

Asimismo, el diplomático destacó que la pandemia ha afectado todos ámbitos de la vida en el mundo, y enfatizó que esta se ha vuelto una amenaza que podría revertir los logros y conquistas que tanto les ha costado alcanzar a los países en materia de desarrollo.

En este sentido, la delegación de Venezuela en la ONU presentó tres propuestas para que sus miembros logren avanzar en medio de la coyuntura de la pandemia hacia la consecución de la Agenda 2030.

Primero, la completa e inmediata derogación de todas las medidas coercitivas unilaterales, violatorias de la Carta de las Naciones Unidas y de las normas del Derecho internacional, que han sido impuestas contra más de un tercio de la humanidad, incluyendo 30 millones de venezolanos, y cuya aplicación hoy, en medio de la pandemia de Covid-19, impide el acceso a equipos médicos, medicinas, pruebas de despistaje, alimentos, combustible y otros servicios esenciales para salvar el mayor número de vidas contagiadas por el virus.

Segundo, la ampliación de la financiación de entidades bancarias multilaterales y regionales en condiciones favorables, sin discriminación ni politización, para suministrar mayor liquidez a los sistemas financieros de los países en desarrollo.

Tercero, el acuerdo de una moratoria de los pagos de servicio de la deuda para todos los países en desarrollo, sin distinción, así como el aumento de la asistencia oficial al desarrollo y el fortalecimiento de la cooperación Norte-Sur y Sur-Sur.

Venezuela reafirmó su compromiso de participar de manera activa en la construcción de un modelo y un sistema multilateral centrado en el ser humano para fortalecer las estrategias en favor de la erradicación de la pobreza y la exclusión social, sobre la base de la solidaridad y la cooperación internacionales.

EFECTOS DE LAS SANCIONES

Samuel Moncada denunció una vez más los devastadores efectos de la aplicación de medidas coercitivas unilaterales contra el pueblo venezolano.

“Venimos hoy a denunciar los devastadores efectos que tiene la aplicación de medidas coercitivas unilaterales contra centenares de millones de personas, literalmente más de un tercio de la humanidad, incluido el pueblo venezolano. Estas medidas ilegales impiden el acceso a equipos médicos, medicamentos, tratamientos, pruebas de despistaje, alimentos, combustibles y otros bienes esenciales para garantizar la supervivencia de nuestro pueblo. Todo en medio de la mayor pandemia sufrida por la humanidad en los últimos cien años”, expresó.

Enfatizó que el Gobierno de Estados Unidos usa la pandemia como arma para potenciar la agresión contra Venezuela y que por ser una política planificada y sistemática constituye un crimen de exterminio, acorde a lo establecido en el Estatuto de Roma.

“En esta coyuntura excepcional, todo acto que intente obtener beneficios políticos egoístas de dominación internacional, usando la pandemia como arma para obtener ventaja sobre otros países, constituye una violación masiva de los derechos humanos, un verdadero crimen contra la humanidad”, sentenció.

Asimismo, el diplomático expresó que a Venezuela se le hace más difícil enfrentar los nuevos retos que impone la pandemia de Covid-19, ya que los recursos financieros nacionales, necesarios para salvar el mayor número de vidas durante la crisis sanitaria, fueron saqueados por entidades bancarias de Europa y Estados Unidos.

En este sentido, exigió al Gobierno de Estados Unidos que derogue las medidas coercitivas unilaterales que impone a Venezuela en violación de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho internacional.

TyF/ Mppre
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