El caso de los Papeles de Panamá es considerado un “escándalo” financiero de grandes consecuencias políticas, que ya ha cobrado sus primeras víctimas. Sin embargo, todo apunta a que el asunto de fondo
lejos de intentar desenmascarar una red de corrupción trasnacional que involucra a líderes mundiales e importantes personalidades de la cultura y la farándula, persigue da un golpe mediático conta quienes se opongan a los intereses de la Casa Blanca., aunque en el camino caigan algunos aliados.
Aunque los periodistas del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) presenten el hecho como un logro del derecho de las sociedades a la información, los resultados parecen contrariar este noble propósito.
Los paraísos fiscales son fenómenos comunes en el capitalismo en su etapa de centralización y expansión. La mayoría de las empresas multinacionales usan estos lugares para la subcontratación de sus procesos productivos a fin de evadir pagar impuestos al Estado.
Las empresas offshore , son una práctica herramienta para la burguesía parasitaria en todo el mundo y no por casualidad, algunos estudios como el de la ONG Intermon Oxfam , sostienen que la tercera parte del Producto Interior Bruto Mundial se encuentra repartido en paraísos fiscales .
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) alerta sobre la existencia de más de 170 paraísos fiscales distribuidos en todo el planeta y hasta google maps ofrece en su buscador un gráfico con los más importantes. Panamá es sólo uno de ellos. Entonces ¿qué es lo escandaloso en el caso de los Papeles de Panamá?
A ESE CUENTO LE FALTA UNA PATA
Los Papeles de Panamá no sólo abren una polémica sobre la ética en el campo de las finanzas, sino también en el del periodismo. Como ha señalado el mismo presidente ruso, Vladimir Putin, él era uno de los objetivos políticos de esta estrategia mediática global. La aparición de Putin y del mandatario sirio Bashar Al assad, comprometen el proceso de paz en la nación árabe. Las “revelaciones” salpican a miembros del alto mando político en China. Parece ser que la intención es inclinar la balanza para perjudicar tendencias antihegemónicas.
Al respecto, durante un foro de medios del Frente Popular Panruso, el presidente de Rusia comentó: “Nuestros socios están acostumbrados a un monopolio en el ámbito internacional y no quieren considerar otra cosa. Pero los últimos acontecimientos en Siria han demostrado que Rusia puede resolver problemas no solo a su lado, sino también lejos de sus fronteras. Nuestra economía se ha vuelto más independiente, más autosuficiente, la capacidad de las Fuerzas Armadas ha crecido varias veces. Pero a los socios les preocupan la unidad y la solidaridad del pueblo ruso. Quieren agitarnos desde dentro y peinarnos como quieren. La forma más fácil es crear desconfianza en la sociedad, indisponer a uno contra el otro».
Putin recordó la posición de la Federación de Rusia sobre la situación en Ucrania y el deseo de los residentes de Crimea de reunirse con Rusia y la posición rusa sobre el tema de la no extradición de Edward Snowden.
En ese sentido, se refirió al caso de los Papeles de Panamá como un ejemplo de la propaganda de los medios extranjeros para desacreditar su liderazgo en el campo nacional e internacional.
«Su humilde servidor no figura allí. Encontraron a algunos de mis amigos, hurgaron algo y lo pegaron. Pero la foto de su servidor está en el primera plana de todos los periódicos”, señaló Vladímir Putin.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República de China, Hong Lei, señaló que se trata de acusaciones infundadas que no serían comentadas por el gobierno chino.
Los Papeles de Panamá, han querido dar inicio a una campaña de desprestigio contra las potencias emergentes de Rusia y China, al más viejo estilo de la Guerra Fría.
Pero la credibilidad y confiabilidad de la “fuente” que dio la información y el manejo “periodístico” de los datos, deja mucho que desear. Se da por sentado que los datos se obtuvieron a través de delitos informáticos, de hackeos de las cuentas de la firma panameña que engañó a sus clientes ofreciendo “máxima seguridad”, pero no cumplió.
En un correo electrónico enviado a sus clientes, la consultora Mossack Fonseca confirmó una «violación no autorizada» de sus servidores de correo electrónico. El socio de la empresa Ramón Fonseca ya ha dicho que la empresa fue pirateada por servidores con base en el extranjero.
Gerard Ryle,director del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) aseguró que la
fuente de la filtración de los llamados Panama Papers es una sola persona “quien manifestó estar básicamente preocupada por lo que él o ella vio en los documentos».
Los documentos fueron originalmente obtenidos por el reportero Bastian Obermayer del periódico alemán Süddeutsche Zeitung, dijo Ryle. “La persona dijo que su vida estaba en peligro si alguna vez se sabía que era la fuente que reveló este material, porque desde luego hay personas muy poderosas que están siendo expuestas aquí», indicó.
Ryle dijo que los documentos fueron «comprados» por el gobierno alemán «y luego subsecuentemente a otros gobiernos alrededor del mundo, incluyendo el británico y el estadounidense, les ofrecieron esos documentos».
El director del ICIJ dijo que su organización está convencida de la autenticidad «debido a que hubo una filtración más pequeña antes de que manejáramos estos documentos».
Es decir, no hay realmente 100% de confiabilidad en un universo de datos que es como una Torre de Babel informática.
Pero todos los caminos conducen a Roma, y todo señala que el mayor interesado en crear esta propaganda contra algunos de sus potenciales enemigos, es el Departamento de Estado de EEUU, tal y como lo afirmó WikiLeaks.
Marina Walker, coordinadora del proyecto por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) negó categóricamente haber recibido dinero del gobierno estadounidense:“El ICIJ no recibe ningún tipo de financiamiento gubernamental, ni de EEUU ni de ningún otro país del mundo. Tampoco recibe donaciones anónimas ni privadas, todas son públicas”. Sin embargo el viceportavoz del Departamento de Estado estadounidense, Mark Toner, informó ayer jueves en rueda de prensa que, «los periodistas recibían financiación de varias fuentes, incluido el Gobierno de EE.UU”. ¿Quién dice la verdad?
Al compararse con las revelaciones de Snowden, los famosos Wikileaks, se observa una diferencia: los leaks del joven ex agente tenía por propósito desenmascarar los crímenes terribles del imperialismo estadounidense en contra de los pueblos. Mientras, los propósitos de los Papeles de Panamá no están claros; no se trata de erradicar la evasión de tributos, porque Panamá es sólo uno de los más de 70 paraísos fiscales en el mundo y no es por cierto, el más destacado.
Por otra parte, al momento en que las “megafiltraciones” pasan a ser propiedad de grandes medios, empieza la confrontación ética entre la labor del periodista y la de los dueños de los consorcios mediáticos para los que trabajan. La información de una denuncia irá sesgada por los intereses políticos de los dueños de los medios.
LAS PRIMERAS «VÍCTIMAS»
*Putin, inocente
La portavoz de la cancillería rusa, María Zajárova, declaró este jueves que su país resta importancia a especulaciones de medios occidentales sobre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, pese a que su nombre no aparece en los denominados Papeles de Panamá.
“Estábamos listos, en el sentido de que la administración presidencial había advertido de antemano de un pronto ataque mediático vinculado con supuestos documentos comprometedores”, afirmó Zajárova en rueda de prensa.
A mi juicio, opinó la portavoz sobre la filtración de la firma panameña Mossack Fonseca, todo el mundo estaba esperando un poco más.
Zajárova observó que en los 11,5 millones de documentos sobre clientes del bufete del país caribeño especializado en la creación de empresas offshore, supuestamente entregados por una fuente anónima a varios medios y periodistas internacionales, se menciona a Rusia “de una manera algo rara, abstracta”.
También reseñó Prensa Latina, quienes participaron en el famoso caso de los WikiLeaks, consideraron que los periodistas que participaron en el proyecto son competentes, pero no son un modelo de integridad ya que realizaron este ataque contra el líder ruso financiados por Washington a través de la Agencia para el Desarrollo Internacional (Usaid, en inglés).
Esto deja en entredicho, toda la integridad ética y la credibilidad de los “Papeles”.
*Macri, imputado
El fiscal federal Federico Delgado imputó al presidente argentino Mauricio Macri por figurar como director de una sociedad opaca en las Islas Bahamas en los llamados papeles de Panamá, según la prensa local y fuentes de Sputnik Nóvosti.
La denuncia contra el mandatario había sido presentada el miércoles el diputado opositor Norman Darío Martínez.
Se debe determinar si la «vida social de las empresas infringió algún tipo penal y, en ese caso, si Mauricio Macri tuvo que ver con la puesta en movimiento de ese comportamiento societal», indica el texto del requerimiento del fiscal.
El fiscal imputó al mandatario por «omisión maliciosa», al no haber declarado en sus presentaciones juradas las dos empresas, y solicitó que se investigue la posibilidad de otros delitos.
*EL FMI no perdona
El primer ministro islandés, Sigmundur David Gunnlaugsson, fue la primera víctima de los “papeles de Panamá”, al presentar la dimisión dos días después de difundirse las filtraciones que le vinculan a una empresa en un paraíso fiscal.
Para el politólogo venezolano Carolus Wimmer; “no le perdonaron el hecho que en 2013, Gunnlaugsson dijo al Fondo Monetario Internacional que no escucharía sus recetas, cuando el ente “aconsejó” al país que no continuara los programas de vivienda. Es sin duda una factura política para que sirva de escarmiento a otros líderes conservadores que quiera insubordinarse”.
“No dejaremos que una institución internacional nos diga que no podemos hacer nada en vivienda», aseguró Gunnlaugsson en aquel momento.
Para 2015, el gobierno de Islandia canceló antes de tiempo, el FMI que ascendían a 332 millones de dólares, lo que suposo el fin del programa de rescate de 2008, sin seguir la fórmula del fondo. Hoy le costó el cargo.
LA LAVADORA DEL PALANGRE CRIOLLO
Para quienes no conozcan la expresión, palangre es un término utilizado para identificar el periodismo express, que resulta del pago por la publicación o fabricación de una determinada “noticia”.
Como en casi todos los casos, las “investigaciones” benefician la mayoría de las veces, los intereses políticos de Washignton. Venezuela no podía quedarse atrás. Como han señalado diversos portales venezolanos, con una investigación del comunicador Luigino Bracci Roa, todos los periodistas del capítulo venezolano de Los Papeles de Panamá, son de marcada tendencia opositora.
El equipo venezolano está conformado por Ahiana Figueroa, Alfredo Meza, César Batiz, Ewald Scharfenberg, Fabiola Zerpa, Joseph Poliszuk, Katherine Pennacchio, Laura Weffer, Lisseth Boon, Roberto Deniz y Ronna Rísquez.
Estos periodistas ejercen en medios marcadamente antichavistas como El país de España (corresponsalía venezolana), y portales informativos de la derecha opositora como el Pitazo, los Runrunes y Efecto Cocuyo.
Todos ellos han recibido apoyo del Instituto Prensa y Sociedad Venezuela (IPyS-Venezuela), una organización que ha sido denunciada por recibir fondos del National Endownment for Democracy (NED), el Departamento de Estado y la USAID a fin de trabajar con medios de comunicación y diseñar mensajes y propaganda contra el gobierno venezolano.
Como se sabe, la Usaid recibe directrices estratégicas del Departamento de Estado y ha sido señalada de complicidad directa con proyectos no militares en el extranjero de la Agencia Central de Inteligencia. En Bolivia, Ecuador y Venezuela, ha sido señalada de incitar y respaldar actos desestabilizadores contra gobiernos legítimamente electos.
Los periodistas del capítulo venezolano, han dado algunos nombres. Ninguna figura relevante de la Revolución como hubiesen esperado. Aseguran que existen más de 270 mil documentos que mencionan a Venezuela y tendrían una supuesta lista con 60 personalidades públicas que estar por publicar.
Al respecto, Bracci Roa señala que el equipo criollo debería colocar a la exploración pública los documentos, si de verdad quiere ser objetivo en este caso.
Sin embargo, ¿puede esperarse transparencia y credibilidad en el trabajo periodístico de profesionales plenamente identificados con una tendencia política antigubernamental?
UNA INVESTIGACIÓN SIN FIN
La cantidad de información anunciada, casi 12 millones de registros, parece improcesable. La tarea es titánica sin dudas, y es casi imposible ubicarlas en espacio y tiempo oportunos. ¿Qué se necesita conocer? ¿Cuándo y dónde?
En el manejo informativo puede caerse en la disyuntiva, que una investigación abra otra y otra y se convierta en una cadena sin fin, toda vez que el mismo presidente de EEUU reconoció que no todo es ilegal.
“Muchas (de esas operaciones) son legales. Pero ese es el problema. Están aprovechándose del sistema», aseguró Obama en una comparecencia en la Casa Blanca para comentar nuevas medidas del Departamento del Tesoro contra «el gran problema global» de la evasión de impuestos.
Es decir, una denuncia que no cuente con el respaldo suficiente de pruebas puede dar objeto a una investigación de una investigación, toda vez que no hay seguridad al 100% del origen de las fuentes.
Lo más probable es que las consecuencias de los Papeles de Panamá, lejos de terminar en la erradicación de los delitos fiscales, devenga en una serie de demandas y contrademandas, donde los mismos “investigadores” terminen siendo investigados por divulgar datos obtenidos de manera fraudulenta y después no obtener pruebas contundentes de un delito.
LA REVOLUCIÓN NO TIENEN NADA QUE TEMER
El presidente Nicolás Maduro, aseguró este jueves, que el Gobierno Bolivariano no tiene nada que temer en el caso de los Papeles de Panamá y de ser necesario, ante algunas denuncias y rumores, que se abran las investigaciones necesarias “caiga quien caiga”.
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