La visita del presidente de Vietnam, Truong Tan Sang, a la monarquía petrolera de Brunei reafirma una sostenida política exterior de blindar vínculos de cooperación con los restantes nueve miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) que ahora lidera precisamente el país que lo recibe.
Sang y su par anfitrión, Haji Hassanal Bolkiah, se enfrascaron en la revisión del estado de las relaciones bilaterales y en la búsqueda de una sustancial ampliación en áreas como la agricultura, pesca, petróleo y gas, fuerza de trabajo, turismo, educación y transportación, pero por igual en defensa.
Datos difundidos indican que el intercambio comercial todavía está lejos de su potencial, con alrededor de 500 millones de dólares en los primeros meses de este año, mientras el monto de las inversiones recíprocas muestra desequilibrios tales como que Brunei ocupa el puesto 12 entre los inversores en Vietnam, en 129 proyectos por cinco mil millones de dólares, y este último solo uno aquí.
Los dos gobernantes convinieron en negociar y suscribir en una cercana fecha varios acuerdos que incluirían uno de estímulo y protección de inversiones y memorandos de entendimiento en captura de especies marinas, contratación laboral y transportación.
También consideraron establecer una «línea caliente» entre las respectivas fuerzas navales y actuar de conjunto en la prevención del crimen, lo que hasta el presente se hace limitadamente por intermedio de entidades policiales internacionales.
Durante las conversaciones se aludió a la necesidad de garantizar la paz y estabilidad en la región, en particular en el mar Oriental, mediante la solución pacífica de los diferendos de soberanía territorial en consonancia con la convención de los derechos del mar.
Al igual que con los seis principios aprobados por la Asean, que en lo adelante toca a Brunei impulsar, sobre todo el proyectado código de conducta de las partes.
El mandatario vietnamita viajará después a Myanmar, con el que su país mantiene un intercambio comercial de apenas 160 millones de dólares y escasas líneas de inversiones, y por ahora se está promoviendo un modelo de apoyo mutuo entre provincias en captura, cría y procesamiento de recursos acuíferos y producción agrícola.
Vietnam aspira a más tras un estudio que realiza su grupo nacional de caucho en la antigua Birmania para plantar allí 200 mil hectáreas de hevea que conduzca a un acuerdo de inversión, del mismo modo que espera concretar con iniciativas un convenio turístico que data de 1994.