A Venezuela le anularon un gol en los 90 minutos reglamentarios|La Vinotinto fue eliminada en penales

El central venezolano, Oswaldo Vizcarrondo, puso en la red un tanto que luego fue anulado, Foto/AFP

Luego de un juego dominado por Venezuela, y que llegó incluso a la prórroga, Paraguay liquidó en penales el sueño de Venezuela de jugar la final de la Copa América. El país no murió en el campo de batalla, sino en el paredón.

Néstor Ortigoza abrió la tanda de penales y cantó gol. Continuó Giancarlo Maldonado, quien también anotó un tanto. El siguiente turno le tocó a Lucas Barrios; de nuevo, gol para Paraguay. El cuarto fue un golazo del venezolano José Manuel Rey. Después, Cristian Riveros pateó otro punto para Paraguay. El criollo Franklin Lucena disparó, pero ese tremendo arquero llamado Justo Villar adivinó su movimiento y la detuvo. Continuó Nicolás Martínez, quien anotó un gol para la albirroja. Nicolás Fedor recompuso el ánimo venezolano con un tanto para Venezuela. Pero Diego Verón, con la patada final, conquistó el triunfo para Paraguay.

Con la derrota, la Vinotinto perdió su pase a la final. El sábado disputará el partido por el tercer puesto contra Perú.

“Creamos más situaciones de gol” y “hemos podido haber ganado el partido”, afirmó el director técnico venezolano, César Farías, en la rueda de prensa realizada culminado el juego. “Los jugadores se dieron íntegros”, y han acaparado las miradas de todo el mundo, subrayó. Farías dijo que no quería criticar al árbitro mexicano, pero sí recalcó que una agresión sin pelota es expulsión. “Nos fuimos con la sensación de que podíamos haber sido los finalistas”, enfatizó. “Nos vamos invictos” y “con la cabeza en alto”. Venezuela “no le tiene temor a los rivales”. Advirtió, no obstante, que la Vinotinto no aceptará un irrespeto más.

El venezolano Juan Arango obtuvo el reconocimiento como mejor jugador del partido.

MUCHA PARIDAD

Venezuela y Paraguay jugaron un primer tiempo de mucha cautela para ambos, en el que prevaleció el sumo cuidado en la marca, la concentración para no perder posiciones y ganar palmo a palmo hasta el último centímetro en las pelotas divididas.

Los guaraníes respetaron a Venezuela; esto, a pesar de que se la jugaban con tres hombres en defensa, quienes recibían la presión de Alejandro Moreno y Salomón Rondón cada vez que salían.

La selección criolla se armó de paciencia, y tras corregir ciertos despistes aprovechados por Darío Verón a los siete minutos con un cabezazo que Vega tapó bien, el equipo se asentó mejor en el mediocampo. Entonces comenzó a fraguar un camino a punta de pico y pala que poco a poco metió en problemas a la oncena albirroja

El equipo patrio no hizo un disparo al arco en la primera media hora, pero después comenzó a llegar aprovechando los espacios de su rival por las bandas.

A los 35 minutos, Rosales por derecha hizo un cambio de frente a Cichero, quien pasó de cabeza a Vizcarrondo para que la metiera al fondo de la red de Paraguay; sin embargo, el árbitro principal, el mexicano Francisco Chacón, anuló la jugada por considerar que Cichero estaba fuera de lugar.

Realmente Venezuela era superior, y a los 43 minutos Alejandro Moreno metió la testa ante otro centro. El intento se estrelló en el travesaño; Rondón remató, e hizo lucir al portero Justo Villar, quien la sacó in extremis.

OTRA HISTORIA

En la segunda parte Paraguay salió a imponer un fútbol de más fuerza frente a la modificada defensa vinotinto. Perozo salió tocado y le dio paso a José Manuel Rey.

Por momentos los guaraníes ganaron varias pelotas divididas, obligaron a las faltas cerca del área y hasta inclinaron la cancha hacia el arco de Vega.

El circuito entre Barreto, Valdez y Barrios apenas le servía para mantener a Venezuela alejada del área de Villar, la cual fue pocas veces pisada por los criollos.

Por retroceder y mantener el compacto defensivo, la Vinotinto perdió parte del manejo en el medio sector. Cuando Paraguay tomó la pelota para sí no llevó tanto peligro, pero evitó que los criollos también lo hicieran.

Con González retrasado y Arango en solitario, a Venezuela le costaba un mundo llegar a pesar de que el cambio de Fedor por Moreno (en el minuto 76) le dio más movilidad en el frente de ataque.

El técnico César Farías terminó el partido con tres delanteros, pero con menos manejo, ya que sacrificó a César González por ingresar a Giancarlo Maldonado. La intención de pisar la salida de los guaraníes por los costados era el objetivo principal. Venezuela terminó los 90 minutos con el manejo del balón.

LA PRÓRROGA

Dos travesaños salvaron a los paraguayos en los primeros cinco minutos de la prórroga.

Venezuela salió a atacar más, presionó y quiso explotar el cansancio de su rival. A los 92 minutos, Maldonado hizo una bicicleta y se sacó a un contrario, pero el disparó pegó en el poste de Villar.

Los criollos ganaron la pulsada. Con una falta a Rosales, Arango cobró un tiro libre casi perfecto, pero que también se estrelló en el travesaño.

Paraguay echó mano de la suerte y se encerró un poco más cuando sufrió la expulsión de Jhonatan Santana a los 10 minutos.

La albirroja seguía apostando a la filosofía del empate, para intentar desgastar a Venezuela y llevarla a los penales. A Paraguay se le acabó el físico y apostó a la suerte de los penales. Venezuela lucho, y aunque gozó de cinco opciones de gol, no celebró.

En el minuto 95 expulsaron al director técnico de Paraguay, Gerardo Martino. En el 102 le sacaron tarjeta a roja al paraguayo Jonathan Santana. En el 106 echaron al asistente del director técnico de la oncena albirroja, Adrián Coria.

En los 120 minutos de fútbol, la selección venezolana fue superior a un rival que se apoyó en su estrategia defensiva para protegerse; sobre todo, en la segunda parte.

T/Alex Carmona, Jhondeni Jaramillo, Carlos Ortiz y Vanessa Davies
F/ AFP