La institución New York Stock Exchange, que rige el mercado bursátil de Wall Street, pondrá en práctica un plan de contingencia para sustituir los operadores humanos por robots en situaciones extremas o de crisis.
Ante un evento catastrófico como el huracán Sandy de octubre pasado, los directivos de Wall Street planifican que el sistema de intercambio accionario con 221 años de existencia pueda funcionar bajo órdenes de una inteligencia artificial.
Si el procedimiento es aprobado por la Comisión de Seguridad Bursátil, la plaza neoyorquina de operaciones dejaría eventualmente millardos de dólares en manos de autómatas electrónicos.
La base de datos del mercado Nasdaq mantendrá un nodo de recuperación en Ashburn, Virginia, y los robots operadores estadounidenses tendrían acceso al sistema incluso desde consolas ubicadas en Estocolmo, detalló el diario The Wall Street Journal.
Expertos en transacciones financieras advirtieron sobre los peligros de un programa que arriesgaría el destino de un flujo millonario de capitales a decisiones dictadas por códigos binarios y cerebros digitales que funcionan con electricidad.