Se proyectará El estado de las cosas (1982)|Wim Wenders tomará la pantalla del ciclo Sábado selecto de Cinecelarg3

La sala Cinecelarg3 proyectará esta tarde, en su ciclo Sábado selecto la película El estado de las cosas (1982), del director Wim Wenders. La función está prevista para las 2:30 pm, en la pantalla del séptimo arte alternativo del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (Celarg), en Caracas.

En este largometraje, un equipo de cine rueda en Portugal, una versión de un viejo filme de ciencia-ficción sobre un holocausto nuclear. Pero, primero, se quedan sin rollo de película, y luego el productor desaparece. Entonces, el director comienza a preguntarse, desesperado, si alguna vez conseguirá acabar la película.

El crítico venezolano Jacbo Penzo refiere en un comunicado que “en el cine las emergencias tienen siempre el mismo origen: el dinero y nada más que el dinero. Cuando el presupuesto se agota el rodaje se detiene y todo se trastoca en una quietud inquieta. Técnicos y actores acceden al limbo incierto del negocio y esperan que los jefes resuelvan el asunto. Los jefes son el director y el productor”.

En el relato de Wenders, apunta Penzo, “Gordon, el productor, abandona el barco y el equipo queda a la deriva. Las existencias de técnicos y actores son presa del aburrimiento, este no perdona ni al director quién solo parece despertar de su abulia cuando un tronco arrojado por el mar rompe una ventana y penetra en su habitación”.

Decidido a averiguar donde se encuentra el productor y porqué los ha abandonado, el director Friedrich viaja a Los Ángeles. Después de una azarosa pesquisa encuentra a su amigo oculto en una casa rodante. Huye “porque tomó prestado dinero de quién no debía y el dinero se acabó y ahora carga con una película “que dirige un alemán taciturno” y además “¡En blanco y negro!” Y a quién le interesa una película así, a nadie por supuesto y menos a los dueños del dinero”, añade el cineasta venezolano.

Penzo analiza que el largo discurso de Gordon mientras recorre las calles de Los Ángeles es una despedida y un tributo al cine de autor. Al final el productor canta una triste tonada que habla del lugar donde todo es posible y los sueños mueren. Friedrich sonríe y acepta.

“Muchos han visto en esta (última) secuencia la extrapolación amarga de la relación de Wenders con Francis Coppola, productor de El Hombre de Chinatown, la primera película americana de Wenders. Pero es poco lo que se saca en claro para decir si esa alusión es cierta o no, lo único es que al estacionar el vehículo un destino nada grato espera a ambos amigos”, puntualizó.

T/ Redacción CO