Winston Fuenmayor: «El ego es el peor enemigo del artista»

Con apenas 21 años ya tiene trucos propios que sorprenden a más de uno

_______________________________________________________________

Winston Fuenmayor es un mago venezolano que con tan solo 21 años de edad fue invitado al festival de circo contemporáneo más importante del mundo: Le Festival Mondial Du Cirque de Demain 2019, que se realiza cada año en París, Francia, resultando ganador del mismo. También destacó en Suiza, luego de ganar la medalla de bronce en el Festival Young Stage de circo, en Basilea.

Tras vivir estas experiencias en Europa su carrera despegó. Desde entonces ha sido invitado en festivales de magia como Masters of Magic en Torino, Italia, Blackpool Magic Convention en Inglaterra y Shanghai Magic Festival en China.

Winston también ha sido convocado para programas de televisión como Tú sí que vales en Roma, Italia, y actualmente forma parte de la nueva temporada de America’s Got Talent, grabado en Los Ángeles, Estados Unidos, y que se estrenó en la cadena de televisión americana NBC.

Además, con su número de manipulación Cígaro, donde mezcla la magia y el teatro dramático, tuvo la dicha de recorrer cincuenta ciudades en China con el tour del espectáculo The Magic Wheels Origin, junto a magos de Las Vegas como Ed Alonzo, Rudy Coby, Josephine Lee and Prosvirnin Clown. Y está por comenzar a trabajar para la compañía de circo GOP Varieté en Alemania, donde forma parte de un espectáculo llamado Wunderbar. Más datos por las redes sociales @Winstonmagicia.

-¿Por qué te dedicaste a la magia?

-Cuando tenía 8 o 9 años vi a un mago en televisión, me marcó de por vida y siempre soñé con ser un mago. Desde entonces, comencé a aprender y nunca la dejé de lado. Me enamoró la idea de hacer cosas imposibles.

-¿En algún momento dudaste de que tendrías éxito en esta carrera?

Nunca vi el éxito como meta sino como las pequeñas buenas cosas que me iban pasando, nunca dudé de mí o pensé en ello. Siempre me mantuve trabajando y presentándome para crecer artísticamente. Sólo hacía lo que me gustaba hasta que grandes cosas empezaron a pasarme. El éxito es un concepto muy relativo, un buen show en alguna fiesta de cumpleaños me podía hacer lucir exitoso, pero ser el mago de que recorre muchos países con su espectáculo también, así que nunca me enfoqué en buscar tal cosa como el éxito. Con disciplina, trabajo y un poco de suerte el éxito se arma en el camino.

-¿Cuáles son los magos del país y el exterior que te han inspirado?

-Estudié en La Casa Mágica, la tienda de magia más emblemática de Venezuela. Su dueño es el Gran Henry, famoso por ser el primer mago que llegó a Venezuela. También estudié con Ernesto Melero, venezolano y campeón internacional de magia que me guio en todo momento. Muchos magos americanos, asiáticos y europeos me han inspirado, magos como Jeff McBride, Rudy Coby, Yu Hojin y muchos más.

-¿Has creado algunos actos de magia o solo te dedicas a repotenciar actos conocidos?

-Al contrario, me dedico a crear actos de magia y repotenciar mi propio material. Creo mis propios efectos de magia y los uno a ideas de actos que tengo, dándole un concepto, un performance distinto, una historia, un porqué a los efectos mágicos que ahí ocurren.

-Apenas tienes 21 años. ¿No te ha pegado esta fama bien merecida de los últimos tiempos?

-Tengo una concepción muy particular sobre la fama, así que nunca me he considerado famoso. La verdad es que la fama es algo que nunca he buscado, aprendí que llega sola cuando el artista hace las cosas como debe. Es muy importante mantener los pies sobre la tierra, el ego es el peor enemigo del artista.

-¿Qué les recomiendas a quienes deseen entrar en este mundo mágico?

-Practicar mucho, estudiar mucho y respetar este arte. Si les gusta la magia es importante estudiar a los grandes maestros que han dejado un enorme legado en la historia de la magia. Los invito a pensar fuera de la caja, pensando diferentes nacen cosas nuevas y eso es lo que el arte necesita.

-Agrega el comentario que mejor te parezca.

-Genuinamente amo lo que hago. Siempre me pregunto qué sería de mí si nunca me hubiese tropezado con la magia, si nunca hubiera conocido los secretos detrás de lo imposible, si nunca hubiera probado ese abrazo disfrazado de aplauso que te da el público,… Qué pesadilla solo imaginarlo.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Cortesía AF
Caracas