Se relajará unos días con su familia y amigos antes de volver a entrenar
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“Centímetro a centímetro, quiero convertirme en la primera mujer que supere la barrera de los 16 metros”, señaló muy optimista Yulimar Andrea Rojas Ramírez, quien pasará unos días “celebrando con mi familia y amigos” en Caracas, antes de seguir sus entrenamientos en salto triple para el año entrante, con los Olímpicos de Tokio 2020 como su principal meta.
En rueda de prensa realizada en la sede del Comité Olímpico Venezolano (COV) en Caracas, Yulimar de manera muy espontánea, respondió a todas las interrogantes de los medios de comunicación: “Me gustaría establecer el récord mundial y llevarme el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Esta competencia es mi principal meta para el año entrante”.
Con apenas 23 años considera que su actual enfoque “profesional” en las competencias, le insuflan confianza para seguir obteniendo cetros como el reciente Mundial de Atletismo en Doha, Catar, donde registró 15,37 metros: “Aunque vinieron las mejores del mundo estaba tranquila. Siempre había un poco de presión, pero estaba relajada porque estaba teniendo un año súper, súper bonito con buenas marcas y muy estable sobre los 15 metros, lo que me daba mucha confianza”.
De paso fue el tercer mejor de la historia en la disciplina y el segundo en su registro personal, ya que en España logró 15:41: “Tengo que prepararme bien, ya que el calendario el año que viene será muy apretado por la presencia de los Olímpicos”.
POR VENEZUELA
Lejos se ve el séptimo lugar con apenas 12:99 que ocupó en una competencia internacional en 2014 a los 17 años: “El haberme ido a España y tener a Iván Pedroso como mi entrenador, le dio otro enfoque a mi carrera. Era acostumbrarme a estar lejos de mi familia y dedicarme a entrenar con pasión. Ha sacrificado mucho, pero estoy muy contenta con los resultados”.
El palamarés de la actual reina del salto triple incluye ser medallista de plata olímpica en Río de Janiero, Brasil 2016, bicampeona mundial en pista cubierta, tricampeona mundial en pista cubierta larga, dos veces campeona mundial al aire libre y múltiples veces medallista panamericana, bolivariana y suramericana.
Piensa que por lesiones o por bajones “el ser humano no debe decaer. Debe trabajar en base a sus errores y obstáculos. Se debe ver la vida con más fuerza y seguir luchando. Prueba de ello fue esta medalla mundial, que es preámbulo de lo que va a ser Tokio el año que viene. Desde que conseguí la plata en Río de Janeiro, ya tenía en mente que para Tokio asistiría como una de las favoritas para el oro. Y esto me motiva más a luchar y trabajar. Quiero ganar porque deseo que mi gente esté orgullosa y diga ‘Yo soy venezolana’. Quiero darle satisfacciones a mi país”.