El Tribunal Superior de Bogotá negó la medida provisional solicitada por la Defensa del expresidente de Colombia, Álvaro Uribe, para suspender la detención domiciliaria ordenada en su contra, manteniendo vigente la decisión judicial mientras se analiza la tutela presentada.
La Sala del Tribunal determinó que no existen motivos suficientes para suspender la orden de detención domiciliaria impuesta por la jueza Sandra Liliana Heredia, quien condenó a Uribe a 12 años de prisión por los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal.
La Defensa del exmandatario argumentó que la medida vulnera sus derechos humanos y la presunción de inocencia, solicitando una medida cautelar para frenar de inmediato la detención.
Sin embargo, el fallo del Tribunal subrayó que “no existen motivos para que, en este estadio del proceso de tutela, se suspenda la orden dictada por la autoridad judicial accionada; máxime que, salvo la inconformidad del actor con la decisión judicial, por el momento ninguna irregularidad se advierte que sea del calado necesario para estimar una afectación relevante a los derechos fundamentales del prenombrado”.
El Tribunal enfatizó que el caso requiere un análisis jurídico profundo, basado en normas constitucionales, el procedimiento penal y la jurisprudencia, lo que solo podrá resolverse tras evaluar la tutela en su totalidad.
La corporación destacó que las decisiones judiciales cuentan con una “presunción de acierto y legalidad”, conforme a los artículos 29 y 229 de la Constitución Política, hasta que las instancias superiores determinen lo contrario.
Por ello, consideró prematuro calificar la orden de detención como “arbitraria”, como sostiene la defensa, y señaló que ambas partes deben presentar y controvertir pruebas antes de un pronunciamiento definitivo.
Álvaro Uribe fue condenado la pasada semana a 12 años de prisión domiciliaria, luego de que la magistrada Sandra Liliana Heredia, del juzgado 44 del penal de conocimiento de Bogotá, confirmase el veredicto histórico, convirtiéndose Uribe en el primer exmandatario de la historia en ser condenado.
Además de los 12 años en prisión domiciliaria, Uribe deberá pagar una multa y será inhabilitado para ejercer cargos públicos por espacio de cien meses y 20 días. También deberá pagar una multa de 2.420,5 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Aunque Uribe fue absuelto del cargo de soborno simple, ratificó su responsabilidad en la manipulación de pruebas y el ofrecimiento de beneficios a testigos para alterar sus declaraciones en procesos judiciales.