Columna En tinta negra|Buhonero (Opinión)

Cónchale, vale, es que el presidente Nicolás Maduro está hablando duro en contra de la corrupción ahí adentro en la Asamblea, y nosotros paraditos frente a la pantalla en la esquina de Padre Sierra, escuchando atentamente pero unos corruptos buhoneros hacen que la gente se escandalice cada vez que oyen los precios de las chucherías.

Los buhoneros que venden un paquete de palitos de maíz con color onoto, hierro y vitaminas que normalmente cuesta 5 bolívares en 15, sí, en 15; o unas bolitas de chicles que cuestan 4 en 8; o cigarrillos detallados en 5 cada uno… Esos que venden el papel higiénico, azúcar, leche, arroz, café que les vende el dueño del supermercado triplicando su precio… Son usureros, estafadores, bandoleros, avaros, tramposos, bandidos, codiciosos, embaucadores, malhechores, asaltantes, ladrones, delincuentes, pérfidos, capitalistas salvajes, sabandijas, bichos de uña. En fin: terroristas. Y como tal merecen ser tratados, merecen confiscación de mercancías, merecen cárcel así sea por un día.

Son tan delincuentes como los pequeños, medianos y grandes empresarios que acaparan y especulan, que se prestan para el juego sucio que primeramente afecta al consumidor, al que viene con su platica o su platota a adquirir un bien o servicio respetando las reglas del juego capitalista: Yo te doy billete y tú me das el producto.

Son tan delincuentes como los socios de las transnacionales que apuestan al estrangulamiento económico de una nación a cambio del triunfo neoliberal y el control de la economía global.

Son tal vez peores pues no pagan impuestos, no dan factura, no dan garantía ni de tres días. Además los inspectores no les pueden poner una calcomanía grandota de esas que dicen: “Multado por especulación”, como le pusieron a mi panadería favorita, pero bien hecho. Son ruines, maltratan al pueblo cuando deberían ser naturalmente solidarios porque son pueblo. Pero no tienen alma.

De cuello blanco o de cuello rojo, dice Maduro bien duro. Visiblemente molesto. Afuera podemos sentir su molestia porque tenemos rabia también. La cosa es con los buhoneros como los que estaban esa noche en Padre Sierra porque son gente humilde pero de otra raza, la raza neoliberal. En su nivel y de acuerdo a sus posibilidades son unos terroristas de la economía.

Y estamos en guerra.

T/ Beatriz Aiffil
baiffil@gmail.com

Estos quinta columna de la alianza wayuu-paraca si saben para donde van, reciclar el dolar producto del narcotrafico y contrabando de la gazolina , todos tienen cedula veneca cuando el festin chavista de la compra y venta de la nacionalidad, el 80 % de estas cayeron en manos de la delicuencia colombiana vallunos y paisas los amos del valle en lo que se refiere a la coca, estos pobres hp son el ultimo eslabon de la cadena, pero tan peligrosos como su jefe el enano de las trenzas largas uribe y su carnal jj rondon, fanaticos politicos-religiosos , de cuidado, ojo pelao, veneco no pases de guevon, guerra avisada no mata patriota.