La promesa electoral de la oposición –acabar con las colas- produjo el efecto contrario: estas se triplicaron.
Los discursos de Henry Ramos Allup causan esas reacciones, así como las leyes ficticias que la MUD anuncia, pero nunca presenta.
La derecha prometió acabar con la inflación, el acaparamiento y las colas, es decir, con lo que provocaron sus financistas internos y externos.
Tal promesa es de imposible cumplimiento porque sería ir contra sus propios proveedores económicos.