Mientras el presidente de México, Enrique Peña Nieto, se preparaba para dar inicio a las tradicionales celebraciones del Día de la Independencia de su país, miles de manifestantes se reunían en las calles de la capital de la nación para exigir su renuncia.
La movilización identificada con el lema “Renuncia ya”, fue convocada en las redes sociales, donde ha sido definida como “apartidista”. La marcha, iniciada poco antes de las 18:00 (hora local), fue encabezada por los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos en 2014.
Los manifestantes protestaban contra el clima de excesiva violencia vivido en el país, la actual situación económica mexicana y los escándalos presidenciales, como el reciente encuentro de Peña Nieto con Donald Trump, candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, quien ha atacado abiertamente a los inmigrantes mexicanos durante su campaña política.
La jornada transcurrió de forma pacífica en su mayor parte. Según sus organizadores, entre 3.000 y 5.000 ciudadanos participaron en las protestas. Sin embargo, los datos de la Secretaría de Seguridad Pública de México, citados por medios locales, registraron cerca de 1.000 personas en el evento.
La marcha se dio en el momento en que Peña Nieto enfrenta el nivel más bajo de aprobación, desde que asumió la Presidencia de México en 2012. Según una encuesta llevada a cabo por el Grupo Reforma, 74% de los mexicanos reprueba la administración del Presidente.