La técnica ocasiona un nocivo impacto ambiental|Baja del precio del crudo pone en riesgo futuro de empresas de fracking en EEUU

Desde junio de 2014 los precios de los hidrocarburos han sufrido una baja de 60%, como parte de una estrategia impulsada por los Estados Unidos (EE UU) para inundar el mercados internacional con su producción crudo de esquisto o shale oil.

Se trata de un petróleo no convencional que exige agresivos procesos de extracción para fracturar las rocas e inyectar elevadas cantidades de agua, conocido como fracking.

Aunque el gobierno de esta nación ha justificado el uso de esta controversial técnica, que ocasiona un nocivo impacto ambiental, argumentando la necesidad de reducir su dependencia del petróleo extranjero, el incremento desmedurado de las actividades de fracking cumple un propósito político de ocasionar la caída de los precios, y a la vez, afectar las economías de los países exportadores de hidrocarburos, como Irán, Rusia y Venezuela.

Sin embargo, tal y como habían alertado los analistas, esta baja en el precio ha producido mella en las pequeñas y medianas empresas dedicadas al desarrollo de proyectos de extracción de esquisto.

La estrategia de Washington pareciera devolverse como un bumerang en contra de un sector industrial que depende en gran medida del apoyo y financiamiento de la banca, y que de seguir sufriendo pérdidas podría generar una crisis económica.

De acuerdo con la empresa de servicios petroleros Baker Hughes, durante la pasada semana se produjo el cese de 94 pozos, lo que representa «la mayor caída desde que se comenzó a medir esta variable en 1987», refieren las agencias de noticias.

De hecho, varias petroleras norteamericanas han decidido frenar sus planes de expansión y cerrar las operaciones de sus pozos para reducir altos costos operativos que requieren del sustento de un barril con un precio base de 60 dólares.

La Agencia de Administración de Información de Energía de Estados Unidos, reconoció que el promedio actual del crudo en 48 dólares por barril constituye un motivo para reducir el número de perforaciones que se efectúan para extraer petróleo del subsuelo.

En su más reciente informe, esta institución aseguró que «el fuerte descenso de los precios del petróleo está teniendo un efecto significante en la actividad perforadora en EEUU, ya que los últimos datos muestran una caída del 16% los equipos de perforación en tierra activos».

Asimismo, la agencia de noticias Reuters, publicó recientemente un artículo en el que planteó que decenas de pequeños productores norteamericanos se enfrentan al desplome de los precios del crudo con la difícil elección «de cerrar pozos viejos de alto costo, o seguir invirtiendo dinero con la esperanza de eludir una crisis».

Este medio, con sede en el Reino Unido, expuso el testimonio de Ray Lasseigne, presidente de la empresa TMR Exploration Inc, ubicada en el estado de Luisiana , y quien se ha visto en la necesidad de evaluar el cierre de pozos destinados a la producción de esquisto

Aseguró que mediante la técnica de fracking, estos pozos extraen un alto nivel de agua salada que requiere de elevados costos para ser separara del crudo.

«Hemos identificado que cerca de 20 de nuestros pozos (10% del total de la empresa), no son rentables económicamente a estos precios», dijo Lasseigne, al señalar que para mantener la sostenibilidad de sus operaciones, se necesita de un barril con un precio de 70 dólares.

ECONOMÍA EN JAQUE

El analista político y periodista estadounidense, Mike Whitne, advirtió que la baja del precio del petróleo podría generar el quiebre de la economía norteamericana.

En un artículo publicado en el portal web Counterpunch, señaló que las pequeñas empresas de exploración y producción podrían ir a la quiebra , si los precios del crudo seguían bajando, lo que a su vez , generaría un efecto negativo en el mercado financiero que sustenta sus operaciones.

«La baja del crudo puede conducir a quiebras e impagos por parte de las empresas, y a su vez precipitar eventos de inestabilidad financiera en los bancos vinculados a esas empresas. El colapso de los activos asociados con el petróleo también podría tener un efecto cadena en otros activos financieros, generando inestabilidad en los mercados de crédito», señaló.

De acuerdo con el analista, la caída de los precios del petróleo normalmente arrastra a otros precios de materias primas, que perjudica a los mercados que las comercializan.

«Esa cadena no es muy diferente a lo que ocurrió con la crisis inmobiliaria que se produjo entre 2006 y 2008 . En ese momento la profunda contracción en el sector mundial de la vivienda no sólo se extendió a otros sectores de la economía real , sino que generó deudas hipotecarias», recordó.

Whitney explicó que la mayor parte de la perforación de esquisto se ha financiado a través de bonos basura de alto riesgo, por lo que la insostenibilidad y caída de esta actividad podría traducirse en una crisis del mercado financiero de Estados Unidos.

«La estrategia de Washington es seriamente arriesgada. Existe una buena probabilidad de que el plan pueda ser contraproducente y generar la caída de las reservas, acabando con miles de millones de dólares en un instante»,aseguró el periodista.

Texto/AVN

.La baja del precio del petróleo con la producción de crudo de esquisto podría generar el quiebre de la economía norteamericana, con lo cual se revela la incapacidad del gobierno de EEUU de castigar paises como Venezuela en su guerra económica para apoderarse de la energía del mundo