El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, señaló que la burguesía sigue buscando diversos mecanismos para intentar mantener el control de la renta petrolera.
Durante la sesión especial en la Asamblea Nacional en la que solicitó poderes habilitantes para fortalecer la lucha contra la corrupción, destacó que este es el centro de la batalla nacional e internacional.
El jefe de Estado indicó que cuando hay un imperio que declara la guerra al país, lo hace para obtener las riquezas, en especial el petróleo.
Alertó que cuando la oligarquía se suma de manera automática a golpes, contragolpes y saboteos es porque pretenden acabar con los controles implementados por el Comandante Supremo Hugo Chávez, para orientar a la inversión del pueblo los recursos obtenidos.
Maduro recordó que durante la Cuarta República “la realidad de un Estado rentista, junto con las deformaciones que genera la ganancia fácil, tiraron a la moral nacional por un despeñadero, convirtieron en ruina un Estado que no se construyó a partir de la producción, era un Estado extremadamente débil”.
No obstante, advirtió que aun a la burguesía criolla le sigue correspondiendo alrededor del 7% del Producto Interno Bruto, lo que quiere decir que la dinámica económica está lejos del socialismo.
Instó al pueblo a abrir los ojos y detectar a quienes verdaderamente saquean todos los al país, mediante el modus operandi de importar barato y luego revender productos al más elevado costo.
Explicó que no en vano la derecha se dedica fundamentalmente al comercio, pues ello le permite una rápida y fluida captación de la renta petrolera y por allí se desangra el país.
“La Venezuela potencia que soñara, trabajara y proyectara nuestro Comandante es radicalmente antagónica con la expansión del consumismo, en función de los intereses de la burguesía parasitaria”, reflexionó el mandatario nacional.
El Presidente enfatizó que, si bien es cierto que estos poderosos sectores ya no monopolizan el Estado como en tiempos de la Cuarta República, igualmente despliegan sus estrategias corruptoras para que la misma renta sobre la que anteriormente tenían control, siga pasando por sus manos y apropiarse de las divisas que son producto de la renta petrolera.