Jesús Bermúdez | Don Bosco, Chávez y la niñez abandonada (Opinión)

El desarrollo del capitalismo industrial y la aplicación de las primeras medidas económicas neoliberales en Europa a partir de la segunda mitad del siglo XIX, trajo como consecuencia diversos fenómenos políticos, científicos, económicos, sociales y religiosos que en medios de sus contradicciones trajeron beneficios económicos a la burguesía industrial y urbana así como consecuencias nefastas a la sociedad en el caso de la niñez abandonada.

El capitalismo europeo vivía momentos estelares con la consolidación del sistema capitalista explotador y expoliador de la clase trabajadora. Escritores, dramaturgos, poetas y artistas en general nos describen en sus obras los acontecimientos cotidianos producto del grado de desigualdad en aquellas sociedades, en especial la muy famosa obra de la novela social del inglés Charles Dickens: Oliver Twist (1837), en la que desnuda la explotación infantil y la utilización de niños para cometer actos criminales, en la sociedad imperial inglesa de la época.

En Italia también proliferaban niños huérfanos, abandonados y despreciados por aquella sociedad insensible; también tuvo su respuesta desde lo religioso y social. Un sacerdote como Juan Bosco (1815 – 1888), dedicó su vida entera a la atención de los niños de la calle de aquel entonces, enfrentando la jerarquía eclesiástica y la sociedad de su tiempo, fundando instituciones que hasta el día de hoy se mantienen en todo el mundo como una herencia de los hombres de buena voluntad al servicio de la niñez abandonada.

En Venezuela el presidente Hugo Chávez, hombre de inmensa sensibilidad social, volcó su atención a la niñez abandonada en nuestro país, creando la Misión Niños de la Patria, como respuesta a las consecuencias de las medidas neoliberales aplicadas durante las décadas de los años 80 y 90 reduciendo drásticamente la presencia de los niños de la calles abandonados y en estado de precariedad.

Se debe reconocer, sin mezquindad, que aquellos niños de la calles que veíamos bajo el efecto de las drogas, el alcohol y en prácticas delincuenciales han prácticamente desaparecidos gracias a la visión de Chávez, la acción del Gobierno y al resto de las instituciones del Estado.

Ya lo ha anunciado el presidente Nicolás Maduro ante la crisis económica, pese a la guerra económica, el golpe económico y la caída de los precios del petróleo se deben mantener los programas sociales.

En la presente coyuntura el futuro de la Patria exige el concurso de todos. Hagamos como Don Bosco y Chávez, convertir los niños de la Patria en los hombres del futuro.

T / Jesús Bermúdez

Amen ! yo le doy gracias a Dios primerameente que cuando vivi en Caracas ! conioci a el grupo saleciano y me ayudo mucho a integrarme en el conocimiento de la palabra de Dios y a sociabilizar !! hay que valorar la obra de grupos de accion como estos!! que sigamos adelante es nuestro deber en todo lo bueno para las nuevas generaciones !!!