“No le entregaron las armas al pueblo”|Douglas Bravo: EL 4-F fue una acción militarista sin participación popular

Foto/Héctor Rattia

“Compañeros, lamentablemente por ahora los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital, es decir, nosotros acá en Caracas no logramos controlar el poder, ustedes por allá lo hicieron muy bien, pero ya es tiempo de evitar más derramamiento de sangre…”. Estas fueron las palabras del comandante Hugo Chávez luego del intento de derrocar al presidente Carlos Andrés Pérez el 4 de febrero de 1992.

Veinte años después, hay quienes sostienen que aquella no fue una rebelión cívico-militar, sino una acción exclusivamente militar. Esa es la versión que defiende el exguerrillero Douglas Bravo, actualmente militante del Partido Revolucionario de Venezuela (PRV-Tercer Camino).

Bravo declaró al Correo del Orinoco que antes del 4-F se dio una alianza de civiles y militares, en la que participaron los partidos PRV, Causa R y luego Bandera Roja. El principal líder del movimiento, comentó, era Hugo Chávez, de quien dijo que estaba “política e intelectualmente” por encima de los otros oficiales. Sin embargo, llegado el momento, “los militares no le entregaron las armas al pueblo” para combatir, tal como se había acordado desde hacía años.

Precisó Douglas Bravo que el alzamiento de la Fuerza Armada, en efecto, no fue una acción que se haya decidido en poco tiempo, sino producto de discusiones y planes que llevaron a la conclusión de que el pueblo y los militares lucharían juntos para derrocar el poder constituido.

OBJETIVO: FIN DEL PUNTOFIJISMO

El 4-F se comenzó a gestar en los años 80, comentó Bravo, quien aseguró que “fueron 10 años de conspiración”. Desde entonces se empezó a definir un triángulo de acción: Fuerza Armada, pueblo y poder. Los dos primeros actuarían juntos para tomar Miraflores, que era el asiento del poder, objetivo del movimiento.

El propósito central que se perseguía no era deponer el Gobierno, aseguró el exguerrillero. Lo que se buscaba era derrumbar el sistema capitalista instaurado por el Pacto de Punto Fijo que surgió luego de la caída de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez, el 23 de enero de 1958. Para este fin se unieron militantes de PRV, la Causa R, Bandera Roja y oficiales de las Fuerzas Armadas.

Un objetivo de esa dimensión exigía la instauración de un gobierno verdaderamente democrático. Según Douglas Bravo, ese fue “un elemento incumplido por el comandante Hugo Chávez” una vez que fue elegido como presidente de la República, agregó.

VARIOS CHÁVEZ

Douglas Bravo es de la opinión de que se deben distinguir varias etapas en la trayectoria del comandante Chávez: la de la conspiración, la de la acción del 4-F, la de la prisión y la del poder.

“Un elemento es constante a partir de 1990: el sector militar se va vinculando cada vez más a sectores conservadores y a partir de la etapa del poder esto queda claramente establecido”, expresó Bravo en 1999 en una entrevista que le realizó el periodista Alberto Garrido y que quedó plasmada en el libro Guerrilla y conspiración militar en Venezuela.

Hoy en día, Bravo sigue sosteniendo esa opinión y menciona como evidencia que la mayoría de los cargos importantes están en manos de funcionarios militares. Según su parecer el tiempo ha confirmado otra de las declaraciones que hace 10 años le diera a Garrido:

“Decíamos (a los militares) que cualquier movimiento militar que se fuera solo hasta Miraflores iba a transformarse, tarde o temprano, en militarismo, en una dictadura militar. Que su papel era ir, pueblo y militares, juntos al Palacio, a tumbar el papel constituido”.

ACCIÓN ADELANTADA

Aunque no llegó a decir que en este momento haya una dictadura militar, el dirigente del PRV-Tercer Camino insistió en que los civiles fueron relegados el 4-F. De hecho, afirmó que la operación para apresar a Carlos Andrés Pérez se había acordado para el 7 de febrero de 1992, y que estaría acompañada por una manifestación popular en las calles.

“Empezamos a llamar a toda la gente del interior para que viniera a Caracas, para que se concentrara en la calle y cuando llegaran los tanques (del Ejército) se encontrarían con una multitud. Pero Chávez se adelantó”, señaló.

“Ya para el 3 de febrero Chávez había ordenado que al PRV no le dijeran nada del alzamiento, particularmente a mí y al Flaco Prada. La gran sorpresa ocurrió cuando algunos camaradas oficiales nos llamaron el 3 de febrero para avisarnos que el alzamiento había comenzado”, mencionó Bravo.

DEL 4-F AL SOCIALISMO

Para Bravo, el 4-F no fue el inicio de la Revolución Bolivariana, fue el comienzo de un proceso militarista. Aseguró que con Chávez y los 13 años de su Gobierno lo que se ha hecho es “prolongar el Puntofijismo”.

“A quien no está con las líneas del socialismo lo catalogan de escuálido. Eso pasa en las universidades, en el ministerio tal, en dónde sea”, acotó.

Para que haya socialismo y un profundo cambio que deje atrás la concepción capitalista se necesita romper con los valores políticos, filosóficos, jurídicos y espirituales del capitalismo, enfatizó. Y señaló que esos valores responden a una concepción del desarrollo, de la que se derivan unos modelos científicos, tecnológicos, energéticos, del Estado, de los partidos políticos.

Otro factor determinante para salir del capitalismo que mencionó Douglas Bravo es la necesidad de un modelo energético diferente del Puntofijismo, que le entregó el petróleo a empresas extranjeras. Y dijo que el Gobierno Bolivariano sigue otorgando el petróleo a potencias foráneas mediante de la conformación de empresas mixtas con otros países.

El modelo económico ha cambiado, reiteró Bravo. Y puso como ejemplo que aún persiste la explotación capitalista de la fuerza obrera. “Al obrero, en el capitalismo, se le extrae plusvalía a través de la explotación. Se la extrae bien sea un capitalista privado, como en Estados Unidos, o como en la Unión Soviética, el Estado. El primero se llama capitalismo privado y lo último capitalismo de Estado. Eso es lo que tenemos aquí, aquí no hay socialismo para nada”, sentenció.

Texto/Nancy Mastronardi
Foto/Héctor Rattia

Douglas..! una cosa es cierta, el imperio ha intentado sacar a Chavez del poder por todas las vías..! no le es de su agrado..! precisamente, porque este modelo se presenta como un puente comunicante entre la izquierda y la derecha de tendencia nacionalista…! los planes del imperio no calan en Venezuela..! no pueden acusar a nadie de comunista..! ni sembrar el miedo como años atrás…! muchos empresarios que antes se asustaban cuando le mencionaban el coco..! hoy están del lado de este gobierno..! y eso es sumamente positivo..! cuando se trata de unificar a todos los factores del país en contra del imperio.
Douglas..! el Obrero de ayer..! luchaba por su clase social..! y los sindicalistas vendían contratos. hoy venden cupos de trabajo y tienen escuadrones de la muerte para asesinar por encargo..! al mal pagador.! o al rival en el negocio de los cupos…! hermano hay que hacer un nuevo estudio de las relaciones sociales actuales..! hablas como si estuvieras en el siglo 20…!

  • ¡ Ay Douglas!! Parece que hay muchos que no entienden la asociación del país con empresas de todo el mundo en La Faja. Incluso este famoso guerrillero y luchador, utópico, que parece soñar con un reguero de cabezas cortadas y decenas de paredes agujereadas por balas de fusil. No viejo…eso no es posible. ¡Ay Douglas… deja la tortillada y vente pa’cá.