El Departamento de Justica de Estados Unidos ha acusado formalmente este lunes a los funcionarios del Ejército chino por realizar piratería cibernética contra empresas comerciales norteamericanas.
Según fuentes internacionales, estas acusaciones se producen después de que el Gobierno estadounidense emitió una demanda contra miembros del Ejército Popular de Liberación chino por realizar espionaje económico.
Estados Unidos ha declarado que estos funcionarios han desplegado una masiva campaña de ciberespionaje, con el apoyo del Gobierno de Pekín, para robar información secreta de sectores comerciales estadounidenses.
Por otra parte, una empresa privada estadounidense, Mandiant, ha publicado que militares chinos tienen una sede en las afueras de la ciudad de Shanghái, desde donde lanzan enormes operativos de espionaje cibernético.
Anteriormente, el presidente estadounidense, Barack Obama, había confesado que según los estudios revelados, su país ha perdido miles de millones de dólares a causa de los robos cibernéticos de China.
Por otra parte, Pekín ha tachado de hipócritas estas acusaciones, evocando el masivo espionaje de Washington en diferentes sectores económicos y sociales del mundo.
Estados Unidos ha acusado al Gobierno del gigante asiático, mientras él mismo es objeto de fuertes críticas internacionales por su espionaje masivo a nivel mundial.
Tras las masivas filtraciones del exempleado de la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA, en inglés), Edward Snowden, en junio de 2013, salieron a la luz pública documentos secretos sobre la existencia de programas de vigilancia ilegales de los servicios de Inteligencia norteamericanos para recoger datos privados, tanto en territorio estadounidense como en otros países.