El Ejército de Siria allanó un depósito de los grupos terroristas, responsables de la violencia en el país árabe desde hace más de dos años, donde encontraron 281 barriles con “sustancias químicas altamente peligrosas».
Este hallazgo fue denunciado por el embajador de Siria ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Bashar Al Jaffari, quien precisó que el depósito estaba en la ciudad de Banias, en el noroeste del país, reseñó Telesur.
Al Jaffari precisó: “El arsenal incautado sería suficiente para destruir una ciudad o un país entero”. Los barriles incautados contenían sustancias como polietilenglicol, monoetilenglicol, monoetanolamina, dietanolamina y trietanolamina.
Luego del allanamiento, las autoridades sirias iniciaron las investigaciones para determinar el origen de estos productos químicos.
En ese sentido, Damasco pidió a la representante del secretario general de la ONU para Asuntos de Desarme, Angela Kane, y al jefe de la misión independiente de Naciones Unidas para investigar el uso de armas químicas en Siria, Ake Sellstrom, que encabecen un equipo que investigue en el país árabe el uso que terroristas dan a estas sustancias.
«Estamos seguros de que la señora Kane y el profesor Sellstrom tendrán una negociación constructiva con las autoridades sirias para poder alcanzar un acuerdo sobre los términos de la misión y su calendario», añadió Al Jafari.
Agregó que esta invitación «confirma la transparencia del Gobierno sirio y su compromiso de cooperar con las Naciones Unidas en la búsqueda de la verdad sobre las denuncias del uso de armas químicas» en el país.
Al Jaffari recordó que Damasco ya había instado a la ONU a investigar el posible uso de armas químicas en la localidad de Khan al-Assal, cerca de la ciudad de Alepo, ya que expertos militares informaron que una sustancia química, probablemente gas sarín, fue utilizada en el ataque terrorista del 19 de marzo pasado, en el que murieron al menos 30 personas, reseñó Telesur.
A finales de mayo, la Policía turca detuvo a 12 opositores sirios pertenecientes al Frente Al Nusra, brazo armado de Al Qaeda en Siria, con dos kilos de gas sarín, considerado un arma de destrucción masiva, de acuerdo con la Resolución 687 de la ONU.