Estados Unidos (EE.UU.) considera que existe una presunta creciente ciberamenaza sobre su territorio, según el director nacional de Inteligencia, James Clapper, durante una audiencia en el Senado.
Al presentar el informe anual sobre los supuestos peligros contra intereses estadounidenses en el mundo, Clapper subrayó que estos pueden venir en forma de ataques cibernéticos o ciberespionaje.
El documento, presentado ante el Comité de Inteligencia de la Cámara alta, refiere que Internet se usa cada vez más como una herramienta por los actores no estatales para lograr sus objetivos estratégicos.
Sin embargo, se evalúa como una remota posibilidad una agresión de este tipo que llegue a causar interrupciones generalizadas en el territorio nacional.
El gobierno de Estados Unidos, no obstante, ha expresado que el ciberespacio se considera un terreno de guerra y que un ataque en Internet podría recibir respuesta militar con armas convencionales.