Por William Fariñas|Granadas de mano: entre la intimidación delictiva y el terrorismo (Opinión)

No dudamos en afirmar que el uso criminal y malhechor de las granadas de mano como armas de guerra en tiempos de paz es un fenómeno militar que  como acontecimiento tiene un alcance más allá de lo delictivo y hamponil. Por lo tanto, si lo que se valora es la peligrosidad de los medios empleados por estos  grupos o bandas armadas, sean cuales quiera sea su naturaleza criminal, esta será́ distinta si lo es para generar intimidación delictiva o para generar violencia terrorista.

El uso de las armas de guerra u otros artefactos igualmente peligrosos como las granadas de mano tienen que ser tratados dentro de la fenomenología de la guerra y la seguridad de Estado. Más allá de la canallesca  cómo se proveen y adquieren las granadas,  parece posible aseverar que la peligrosidad de estas armas  respecto a la violencia ­(al menos desde que estas se exhiben durante este tiempo electoral) genera a la vez una elevada peligrosidad con efectos intimidatorios para la paz de la República y de las próximas  elecciones parlamentarias.

La violencia criminal de estos grupos sirve como instrumento o medio del terrorismo para influir sobre una determinada audiencia, sembrando temor, miedo y terror. Estos elementos que afectan la psiquis directa del cuerpo social, se convierten en factores claves para el asedio en el momento de actuar de las bandas  que utilizan estas armas de guerra.

Considero igualmente que se pueden establecer otras hipótesis de trabajo para desnudar estos acontecimientos: las continuas manifestaciones de odio e intolerancias de carácter social por parte de grupos de la ultraderecha venezolana evidencian el grado de complicidad que existe con las bandas delictivas y terroristas que operan en el submundo criminal y paramilitar.

La intimidación provocada en 2014 y 2015 a la sociedad venezolana, por agentes entrenados en los actos fascistas y terroristas de las mal llamadas «guarimbas», delinean quiénes son los posibles autores políticos que están detrás de estos delitos. De hecho este tipo de situaciones son considerados por la comunidad internacional como actos terroristas.

Igual relevancia y dentro de este contexto se sitúa la Resolución 1269 del 19 de octubre de 1999 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que considera el terrorismo como: “…cualquier otro acto destinado a causar la muerte o lesiones corporales graves a un civil o a cualquier otra persona que no participe directamente en las hostilidades en una situación de conflicto armado, cuando el propósito de dicho acto, por su naturaleza o contexto, sea intimidar a una población u obligar a un Gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o a abstenerse de hacerlo”.

Es un gran desafío del Estado venezolano actuar con las previsiones posibles y aplicar todo el peso de la justicia a estos terroristas que quieren enturbiar las elecciones venideras de diciembre. ¡Venceremos!

@williamfariñas

yo me pregunto, si las grandes potencias occidentales, ora estas agrupadas en la OTAN, las naciones alineadas en europa oriental, las del mrdio oriente, china y corea del norte , japon, taiwan y gran parte del sudeste asiatico, temiendo las posibilidades de una guerra no avisada,toman todas las medidas preventivas y disuasivas, dentro de estas hay una que venezuela y los paises del bloque progresista y democratico deberian implementar de manera permanente, EJERCICIOS MILITARES ANTE LA POSIBILIDAD REAL DE LKOS LLAMDOS GOLPES SUAVES, GUERRAS ASIMETRICAS, GUERRAS ECOMICAS Y TERRORISMOS MEDIATICOS, se impone hacer simulacros en vivo de como contrarestar estos fenomenos cuyas violencia y ferocidad escapa a la nomenclatura de una guerra de viejo tipo, por ejemplo simular un golpe de estado con participacion de agentes externos como capturar los medios de comunicacion , los nichos de la oligarquia, sus bienes, familias y fortunas, por ejemplo individuos como los LEOPOLDO LOPEZ, C