Recomendó tomar como guía el trompo de los alimentos|La lonchera “es un vehículo para el cambio de patrones de conductas”

La alimentación y nutrición de niñas y niños “va a tener una consecuencia en su etapa adulta, en cuanto a aprendizaje, enseñanza, capacidades y adecuado desarrollo físico”.

Marilyn Di Luca, directora ejecutiva del Instituto Nacional de Nutrición (INN), señaló que en las primeras etapas de vida “es donde se genera el desarrollo cognoscitivo, y todos los componentes de pensamiento y construcción para el desarrollo de un ser humano, razón por la cual es muy importante garantizar la alimentación de nuestros niños, pero alimentación de calidad, alimentación suficiente en cuanto a energía y nutrientes”.

En este sentido, el Instituto Nacional de Nutrición, como ente adscrito a la Misión Alimentación, desarrolla programas de alimentación escolar que involucran a los docentes con la orientación de los proyectos de aula: “Es muy importante que los niños se formen como sujetos críticos ante el tema de la alimentación, pues esto viene a formar parte de una valoración cultural para toda su vida”.

Refirió que el aprendizaje en las aulas va más allá de lo académico, “que aprendan el abecedario, que aprendan construcción de frases, que aprendan a leer y a escribir”.

Según Di Luca, el salón de clases “es un espacio de aprendizaje para toda la vida, un espacio de formación de valores”.

Aseveró que los chiquilines “no sólo aprenden a comer en casa, aprenden a comer también en la escuela; y en ese sentido creemos crucial el hecho de que en los proyectos de aula los docentes manejen conceptos básicos de alimentación y nutrición para que esto forme parte de las herramientas de enseñanza”.

LONCHERAS NUTRITIVAS

Según la directora del INN, la alimentación es un tema transversal en toda la formación: “Creemos que es fundamental para la construcción de una nueva cultura alimentaria”.

En las instituciones educativas donde no existe comedor escolar, se orienta a madres y padres para la elaboración de loncheras adecuadas y nutritivas.

En resumen, Di Luca sostuvo que en el plantel se “planifica una alimentación gratuita, de calidad y suficiencia para el desarrollo de los niños y niñas; y con un componente pedagógico nutricional hacia una nueva cultura alimentaria, enfocada en la triada escuela-familia-comunidad”, que involucra además a los trabajadores del Programa de Alimentación Escolar (PAE).

Indicó que, con la creación de la Corporación de Alimentación Escolar, el Instituto Nacional de Nutrición, como parte de la Misión Alimentación, va a vincularse con el tema de la orientación nutricional.

Comentó que más allá de la lonchera, madres y padres deben tomar conciencia de la importancia del comer bien, con respecto a los alimentos que se escogen y cómo combinarlos. Por eso el INN ideó el trompo de los alimentos en el año 2008: “Viene a sustituir patrones impuestos que no representaban la identidad de los venezolanos y las venezolanas, pero lo más angustiante para nosotros es que muchos de los patrones de consumo que orientaban estos íconos, como la pirámide de los alimentos, iban alineados al tema de consumo de grasa, al consumo excesivo de azúcares”.

Enfatizó que este modelo de alimentación no estaba vinculado “al plan de desarrollo de nuestra nación porque orientaba en base a alimentos que no se producen, o no están planificados para extender la producción en nuestro país”.

Señaló que actualmente hay 130 mil maestros que han participado en actividades del programa Nutriendo Conciencia desde la escuela para el vivir bien.

Además, se han distribuido 27 mil ejemplares de la colección de libros -que llevan el mismo nombre- a más de 9 millones de niños: “Se cuenta también con 3,7 millones de Canaimitas, que tienen incorporados componentes de alimentación y nutrición”.

Con respecto al PAE, informó que participan 50 mil personas: “Es una red amplia que atiende a 4 millones de niños y niñas”.

Subrayó que la lonchera “es una herramienta importante para la consolidación de esa cultura alimentaria para el comer bien y para que eso incida en el vivir bien de nuestros niños, adolescentes y adultos”.

Dijo que desde la década de 1990 se observa sobrepeso y obesidad en las niñas y los niños: “Estamos viendo una aparición de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, hipertensión, lo que se llama dislipidemia, que es la aparición del colesterol y los triglicéridos en nuestros niños y niñas”.

Recalcó que es crucial “avanzar de manera contundente hacia un cambio de paradigma desde los patrones de consumo en edades tempranas” para cambiar de manera radical el modo de vivir en este país”.

CONSTRUIRLA EN LA CASA

Di Luca comentó que la lonchera debe construirse en la casa, con la participación de la niña y del niño: “Nos hemos encontrado experiencias maravillosas donde el niño, a través del trompo de los alimentos, quiere ver más franja verde, quiere ver hortalizas y frutas, le tiene miedo a la comida chatarra, identifica que el exceso de azúcar no le hace bien para la salud, identifica que las bebidas gaseosas tampoco le hacen bien para la salud, identifica que quisiera comer más tubérculos y otros alimentos, los quiere ver más en la lonchera”.

Enfatizó que la lonchera “es un vehículo para el cambio de patrones de conductas”.

En tal sentido, el Instituto Nacional de Nutrición recomienda tomar como guía el trompo de los alimentos: “La idea no es seguir trabajando con una publicidad de un producto, y que sea ese producto la panacea y la maravilla porque contiene todo lo que la nutrición de un niño requiere para tales edades. Muchos medios de comunicación comercial promocionan productos diciendo que si usted no toma esta leche, si usted no toma este cereal, si usted no toma tal producto pues entonces el niño no va a tener el coeficiente intelectual para el cual está programado genéticamente”.

Explicó que lo más importante es combinar adecuadamente los alimentos: “El trompo orienta de mayor a menor. Una lonchera que responda al bailar el trompo es una lonchera que pueda tener una arepa, que forma parte de la franja amarilla; una inclusión de vegetales, pudiera ser la incorporación de tomate, rodajas de tomate o una fruta. Es muy importante también enseñar a los niños lo maravilloso de apreciar el sabor de una fruta, no es igual que nosotros le licuemos una guayaba a que el niño se encuentre con la textura de la guayaba, se encuentre con el sabor exclusivo de la guayaba, del color maravilloso de la guayaba, y ahí apreciar también el guaral del trompo que es el agua”.

También se deben incluir proteínas con queso y untar las arepas con yogurt preparado con mostaza y cilantro: “Los niños también se van reencontrando con otra forma de aderezar que no sean los cubitos”.

Agregó: “La sardina es uno de los pescados más económicos y uno de los pescados más ricos nutricionalmente. O sea, son ricos en calcio, son ricos en proteínas, tienen grasa favorable para la salud que son los omega que bien caros los venden como fármacos. Consumiendo diariamente tres sardinitas nosotros podemos tener el valor de más de 20 pastillas que tiene un frasco de esos conocidos omegas que venden comercialmente. La puntica del trompo nos indica: ¡Mosca con el azúcar! ¡Mosca con la grasa! Pero debemos agregarla de acuerdo a la proporción del trompo, en pequeñas cantidades, cuidando nuestra salud”.

Destacó que la comida hecha en casa “te llena de energía; energía para la vida, energía para el amor, energía para el aprendizaje, y si bien estamos inmersos en una vida moderna, muy acelerada, muy dinámica, creo que podemos tomarnos un tiempito para pensar en la alimentación de nuestros hijos. Poner ese poquito de energía positiva a los alimentos que van a llevar nuestros niños a la escuela”.

JUGOS PASTEURIZADOS

Sobre la incorporación a la lonchera de jugos pasteurizados, la directora ejecutiva del INN señaló “que líneas amplísimas de jugos pasteurizados o jugos UHT que además han sido enriquecidos con vitaminas y minerales”.

No obstante, advirtió que tienen un alto contenido de azúcar, así como conservantes y colorantes que generan reacciones alérgicas.

Dijo que el azúcar incide en la respuesta hormonal al activarse la sensación de hambre: “Entonces los niños, en periodos más cortos tienen más ansiedad para comer”. Por el contrario, las frutas contienen fibras y el muchacho se sacia.

“Nosotros, como parte del Gobierno, creemos que es muy importante que se desarrollen líneas industriales para el procesamiento de alimentos porque eso permitiría diversificar la dieta. De hecho, este instituto como parte de de la Misión Alimentación dentro de sus laboratorios ha venido presentando una línea que llamamos línea Nutrivida. Es una tecnología de alimentos para que las personas estén bien alimentadas y para disminuir esos agentes agresores, y uno de los cruciales para nosotros es el azúcar y la grasa”.

Aseveró que una alternativa es producir jugos industrializados con frutas criollas.

LAS CANTINAS

Sobre las cantinas, la vocera indicó que con la creación de la Corporación de Alimentación Escolar se actualizarán las normas: “Tienen que cumplir normas y reglamentos que reúnen recomendaciones del Ministerio de Salud, del Ministerio de Alimentación, INN, de Comercio y de otros entes. Pero creo que este año el énfasis tendría que estar dado en la supervisión de que esas normativas se estén cumpliendo en los establecimientos, y el llamado también sería a la organización de los padres, de esa triada que mencionaba padres-familia-comunidad para que los papás también estén pendientes de lo que están comprando los niños”.

Recomendó a los representantes a visitar las cantinas al menos una vez al mes “para ver qué es lo que le están ofreciendo a su niño”.

ALIMENTACIÓN SANA Y SOBERANA

Yanehir Reyes, directora del Centro de Educación Inicial Familia de Maíz del Instituto Nacional de Nutrición, dijo que una de sus primeras tareas fue familiarizarse con el trompo de los alimentos “para estar convencida” de los beneficios de la buena alimentación, y pasar estos conocimientos a los alumnos.

“La alimentación es un área de aprendizaje para los niños y las niñas”, aseveró.

En cuanto a la lonchera, advirtió a las madres y a los padres que las principales víctimas de la publicidad de los alimentos chatarra son sus hijos: “Es muy importante una familia organizada, exigiendo una alimentación sana y soberana”.

Señaló “que empezamos a reconocer nuestra identidad, o a construir nuestra identidad, a partir de la alimentación”.

Dijo que en el INN “nos acercamos más a la naturaleza con el rescate de los huertos escolares, y los niños tienen experiencias directas con la tierra”.

T/ Janet Queffelec Padrón
F/ José Luis Díaz-Joel Aranguren

Deberian prohibir terminantemente la venta de Nesti, refrescos, jugos de cajitas, malta todas esas bebidas afectan lor riñones.Las madres dejar la flojera y prepararle una buena lonchera a sus niños, se evitaran daños irreparables en la salud de sus hijos.Otro problema es la venta de chucherias en los alrededores de las escuelas.

  • Los refrescos y comida chatarra, deben tener un alto impuesto ya que son los principales responsables de la obesidad y diabétes en nuestra población, este impuesto estaría dirigido a centros médicos especializados en diábetes y obesidad y al INSTITUTO NACIONAL DE NUTRICIÓN (INN) para la educación y divulgación de riesgos a los que estamos sometidos por el consumo excesivo.

  • EXCELENTE OPINION DE ESTA DIRECTORA DEL INN, PERO ME PREGUNTO: ¿ QUIEN HACE CUMPLIR QUE LAS CANTINAS ESCOLARES EXPENDEN ALIMENTOS SANOS Y NUTRITIVOS? QUIEN SUPERVISA, QUIEN DICTA TALLERES A LOS ENCARGADOS DE LAS CANTINAS PARA QUE TOMEN CONCIENCIA. Y LO OTRO LA SUPERINTENDENCIA DE PRECIOS JUSTOS DEBERIA FISCALIZAR A ESTAS CANTINAS ESCOLARES, VENDEN A PRECIOS EXCESIVO, ES UNA VERDADERA ESTAFA, UN JUGO DE NESTI LO VENDEN EN 30 BS, UNA MALTA 20 BS, Y QUIEN LOS OBLIGA A VENDER SOLO JUGOS NATURALES.