En el contexto de la celebración de los 55 años de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), el presidente Nicolás Maduro confirmó que la organización debe convocar una Cumbre para discutir la formación de una nueva alianza por la estabilidad del mercado petrolero.
Este es el momento de que la OPEP convoque una cumbre del bloque y se convierta en un motor “de la construcción de una nueva alianza” para la estabilidad y la defensa del mercado petrolero y de los precios, expresó el Jefe del Estado durante un acto celebrado en la sede de Pdvsa, en La Campiña.
“Tenemos el patrimonio, la organización, la capacidad, la estructura técnica”, además de “la experiencia para entendernos en las peores circunstancias”, alegó el Mandatario Nacional.
UNA NUEVA HORA
Ha llegado “una hora nueva” y el planteamiento de Venezuela es viable y contundente, sostuvo el Mandatario. “Lo hacemos con la confianza de que ha llegado el momento de establecer mecanismos ya probados” y exitosos, que deben ser compartidos “con países productores de petróleo no OPEP, con los cuales hemos venido trabajando en el transcurso de estos meses” e intercambiando opiniones y propuestas.
“Llegó el momento de convocar esa cumbre presidencial, y que la OPEP asuma su papel” para una nueva alianza de países OPEP y no OPEP, y que “seamos capaces de mandar un mensaje claro”.
Venezuela tiene “un conjunto de propuestas”, anticipó. Una de ellas es colocar un precio base: “Estamos trabajando una propuesta que vamos a compartir con un equipo técnico-político de la OPEP” rumbo a esa Cumbre. Sería “un precio base con una banda de flotación”.
Maduro certificó que buscan un esquema ganar-ganar.
La situación actual de inestabilidad del mercado afecta la economía, las inversiones en el sector y hace “inviable el funcionamiento de nuestros países y de los grandes exportadores o de los exportadores de petróleo”, razonó el Presidente. Recordó que hay “nuevos actores que marcan el rumbo” y criticó duramente el petróleo de esquistos.
DOS CICLOS
Maduro dijo que el equipo de Pdvsa tiene la visión clara del plan energético de la patria.
Al comentar el libro Hundiéndonos en el excremento del diablo, deploró que el petróleo haya marcado la cultura del derroche, el populismo y la corrupción. Juan Pablo Pérez Alfonzo, venezolano fundador de la OPEP, lanzaba “alertas adentro de nuestros países y alerta más allá de nuestras fronteras”.
El Jefe del Estado estimó que la historia de la OPEP podría dividirse en dos ciclos: el primero, desde su fundación en 1960 y hasta el año 2000, cuando se construyó un patrimonio común con capacidad de influencia y resultados verificables en la historia.
Subrayó el esfuerzo hecho por el presidente Chávez para la revitalización de la organización. Recalcó que si el 15 de septiembre de 1960 fue la fundación, la Cumbre convocada por Chávez para el 24 de septiembre permitió “refundar la OPEP hacia el siglo XXI, en nuevas condiciones”.
Aunque la situación ahora es diferente, la OPEP “tiene mucho que dar todavía a la historia de la estabilidad energética, de la estabilidad económica” en los meses y años por venir.
Hay una nueva realidad y debe haber una adaptación a ella, enfatizó el líder bolivariano.
La OPEP “ha sido centro de ataques para impedir” el uso soberano de los recursos, expresó el presidente de Pdvsa, Eulogio Del Pino. Señaló que se vio la necesidad de crearla para la defensa de los recursos de las naciones.
El gerente petrolero señaló que, 15 años después de la resurrección de la OPEP gracias a la acción del presidente Chávez, “las amenazas se han transformado en agresiones contra muchos de los países de la OPEP”, mediante sanciones y guerras económicas.
La organización está llamada a tomar de nuevo “el papel protagónico que la historia le ha reservado”, apuntó. Debe tener un rol protagónico en la búsqueda de la paz.
Pedro Merizalde, ministro de hidrocarburos de Ecuador, explicó que recursos energéticos se deben convertir en inversión social. Dijo que Ecuador quiere ayudar a buscar “un precio razonable, tanto para beneficio de los países productores como para beneficio de las empresas que trabajan en esta industria y de los consumidores”.
El expresidente de Pdvsa y hoy embajador venezolano ante Cuba, Alí Rodríguez Araque, sentenció que la OPEP busca defender de manera eficaz “sus legítimos derechos de propiedad sobre un recurso natural”. Quien estudie los antecedentes de la OPEP verá “cómo estaba muy endeble el ejercicio de la soberanía de nuestros países”, refirió Rodríguez Araque.