El Sur también existe | La maldición de la Malinche (Opinión)

Las redes sociales pueden llegar a ser un ejemplo de los intereses que se posicionan en ellas. Aunque sabemos que hay una industria que, en algunos casos, los moviliza y posiciona ciertos temas, no es menos cierto que las usuarias y los usuarios influyen en ella. En el caso de la población opositora, vemos con frecuencia que sus referentes comunicacionales y políticos no son de estas tierras, por lo general están en Estados Unidos.

CNN es su vitrina principal. Esta empresa de comunicación al servicio de los poderes establecidos en el imperio estadounidense, demuestra sin ambages que forma parte de la cruzada para acabar con la Revolución Bolivariana. Ningún país recibe de ese canal un programa casi exclusivo para atacar a sus instituciones. El caso del mexicano maltratador de mujeres, que hace gala de la patanería en su máxima expresión, tiene como referente comunicacional el caso de un anterior canal nacional, que se dedicó por años a bombardear la psique del sector opositor para llevarlo a grados de disociación graves.

Los medios de comunicación han sido una extensión de la guerra contra los procesos populares en el mundo. Se desatan como jauría con la ayuda de los países de la derecha internacional. El editor Agustín Edwards recibió en los años 70 más de un millón de dólares del Gobierno estadounidense para destruir moralmente al gobierno del presidente Salvador Allende.

En Venezuela se ha comprobado el desembolso de fuertes cantidades de billetes verdes con el mismo fin. Antonio Ledezma, por ejemplo, fue a Israel a darle garantías de que con ellos en el poder las relaciones con ese Gobierno genocida volverían a la normalidad. Estarían listos, ya lo declaró uno de sus voceros, para acudir al FMI y negociar la venta del país a los intereses foráneos.

Hay demasiado malinchismo en el ambiente. La Malinche fue una indígena mexicana que sirvió de intérprete, consejera, amante e intermediaria del conquistador Hernán Cortés, facilitando el proceso genocida contra su propio pueblo.

Debemos cuidarnos del malinchismo. Incluso del endógeno, que prefiere dar a otros lo que este país puede producir.

T/ Ramón Alirio Contreras G.

Lo expresado en este artículo es cierto, solo que parcialmente cierto, dado que Gobernar con tal falta de DISCERNIMIENTO, de tino y decoro, de tanto DESAMOR PATRIO y Amor al prójimo, es, (por decir lo menos) SUMAMENTE DIFÍCIL,… Encima, con una dirigencia opositora tan barrunta, apátrida, antidemocrática e inmoral, más difícil aún,.. Entonces,..? El «juego» pareciera trancado, hasta que Dios disponga lo inexorable y aparentemente inevitable, pase cuanto tenga que acontecer, y surja un nuevo despertar en esta Patria, nuevos liderazgos, menos mesiánicos, más patriotas, más humildes, menos vanidosos, más eficientes, menos grandilocuentes,… Allí no habrá red social que valga, ni en contra ni en favor,.. Solo el pueblo decidirá su propio destino, de la mano de Dios,.. Dios, apiádate de este pueblo!

  • Confiscarles sus mal habidas propiedades y sin compensarlos con un solo centavo. La Revolución Bolivariana derrocha su tiempo en cotorrear, halarse los pelos, arrancarse la trapería e ir de una pataleta a la otra acusando, señalando, advirtiendo.
    ¡ ACCIÓN INMEDIATA ! ¡ ARROJAR A PATADAS, DONDE PERTENECEN, A ESTA CANALLA GOLPISTA Y ANTI-VENEZOLANA AL SERVICIO DEL NORTE REVUELTO Y BRUTAL, DAS VIERTE REICH, EE.UU., EL ESTADO TERRORISTA, NEO-COLONIALISTA, GEOCIDA Y GENOCIDA MÁS BELICOSO DEL PLANETA.
    ¡ VIVA LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA !
    pjmelián