Mediante un estudio realizado por especialistas en finanzas se determinó que más de 92% de las divisas liquidadas por el antiguo Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (Sitme) eran utilizadas por sectores especulativos de la gran burguesía empresarial y la pequeña burguesía de importadores, expresó este jueves el especialista en administración y finanzas, José Ignacio Acuña.
Durante una entrevista concedida al espacio D’Frente difundido por Venezolana de Televisión, el experto indicó que el Sitme demostró tener muchas debilidades, debido a que las divisas tramitadas a través de ese mecanismo se iban al mercado especulativo.
Explicó que estos factores especulativos mencionados recibían dólares a un precio regulado y a través de operaciones de recompra y apertura de cuentas en el extranjero, efectuadas por el sector financiero privado, estos pequeños agentes adquirían bienes y servicios que eran colocados en el mercado venezolano a una tasa especulativa y no preferencial.
SOBRE EL SICAD
Por otra parte, Acuña señaló que el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) utiliza un método que es una variación del creado por el economista canadiense y ganador del Premio Nobel de economía , William Vickrey.
«En Venezuela, desde hace tres años se aplica este método para las operaciones de compra de los bonos de la deuda pública, no es más que un método, es subasta que permite de acuerdo a la capacidad de oferta que tenga el Banco Central de Venezuela y la posible demanda que pueda surgir, generar un mecanismo de negociación y de subasta» de las divisas, afirmó.
Aseguró que este nuevo método no garantiza que quien ofrezca más sea quien obtenga las divisas, a esto se suma las prioridades del Estado venezolano. Sobre este aspecto, agregó que los sectores de la economía que tendrán la prioridad para acceder a la divisa son alimentos, salud y manufactura.
El pasado martes 19 de marzo el ministro de Planificación y Finanzas, Jorge Giodarni, informó que la aplicación del Sicad garantizará la transparencia en el proceso de asignación de divisas, y fomentará la lucha contra la especulación al permitir controles posteriores de verificación de importaciones.