El movimiento Ocuppy Wall Street (OWS) cumple este sábado tres meses de protestas y acciones para denunciar el sistema político y económico de Estados Unidos.
OWS nació en Nueva York, lugar donde funciona la Bolsa de Valores que, según los indignados estadounidenses, es uno de los símbolos de la actual debacle de la nación.
Para el aniversario, el movimiento convocó a ocupar espacios públicos, donde se realizarán muestras de arte y se presentarán músicos locales.
En un comunicado, los integrantes de OWS aseveraron que “ocupar es encarnar el espíritu de liberación que deseamos para nuestra sociedad”.
El periodista Alejandro Nadal escribió, a veinte días de iniciarse el movimiento: «Si usted quiere apoyarlos visite los portales occupywallst.org y adbusters.org» y pronosticó que si «hoy son unos cuantos miles» entonces «mañana serán muchos más».
Para el comunicador mexicano de La Jornada, «eso es lo que más teme el poder. Por eso arrestó a 700 el sábado pasado, cuando intentaban cruzar el puente de Brooklyn», recordaba el periodista.
En efecto, a los pocos días de su irrupción en Nueva York, el movimiento de indignados se propagó por la mayor parte del país y, en el último tiempo, unió sus reclamos con otros sectores, como sindicatos y agrupaciones que defienden los derechos civiles y de los inmigrantes.
En reiteradas oportunidades, los indignados fueron desalojados de las plazas del país y reprimidos violentamente por la policía, que arrestó a cientos de personas que participaban de las protestas.
OWS responsabiliza por la actual crisis a los banqueros y los grandes empresarios, quienes representan apenas el 1% de la población estadounidense.
En la actualidad, Estados Unidos tiene una desocupación de 8,6% y desde que comenzó la crisis hace tres años, el país perdió ocho millones de puestos laborales.