El Movimiento de Pobladores fue una de las organizaciones que participó ayer en el foro Territorio, Tecnologías y Gestión que se realizó durante la segunda jornada del Encuentro Internacional de Ingeniería y Arquitectura para el Vivir Bien. Juan Carlos Rodríguez, militante del colectivo, expuso la importancia de la autogestión en el “horizonte estratégico” de la construcción del socialismo.
Rodríguez explicó que la autogestión es una forma de organización social para la gestión de la vida. En este sentido, representa una alternativa al “metabolismo del capitalismo”: “Es el horizonte estratégico al que apostamos”.
La autogestión no se limita a una forma de construir viviendas, aclaró, sino que es una manera de organizar la vida. Asimismo, enfatizó que “no queremos que se limite a las comunidades en las que vivimos, sino que sea la forma de la sociedad completa”.
Durante su intervención, Rodríguez argumentó que el socialismo es esencialmente autogestionable. Sin embargo, aún prevalecen las confusiones al respecto. Uno de los ejemplos es considerarlo igual al autofinanciamento.
SUPERAR EL MODELO BUROCRÁTICO
Néstor Jeifetz, miembro de la Federación de Cooperativas Autogestionarias de Argentina, también participó en el evento. Explicó que buscan la reivindicación de este concepto, y la interacción Estado – organizaciones populares es un tema desafiante “porque hay que pasar el superar el burocrático”.
Destacó que Venezuela es un gran ejemplo en la región y este Encuentro Internacional de Ingenieros y Arquitectos lo demuestra. “Entendemos que la existencia del proceso bolivariana implicó la recuperación histórica de esa perspectiva de la humanidad”, expresó.
CONTRA EL LUCRO
Por otra parte, señaló que otro de los temas debatidos es la existencia de modelos centrales que están enfrentados al sistema lucrativo o capitalista. Uno de ellos es la producción autogestionaria y el otro es la producción estatal; no obstante, consideró que es necesario ir generando un esquema mixto y funcional.
“Este es otro punto de comunión con el proceso bolivariano. Creemos que ese es el desafío en los procesos de construcción: Ir instalando como modelo dominante de producción a las alternativas anticapitalistas”, sostuvo. Esto implica un escenario donde las necesidades del pueblo “no puedan ser base ni argumento de los negocios empresariales”.
Jeifetz cree que la transformación se genera de modo cotidiano. Es por ello que valora al proceso bolivariano, porque “está relanzando para una perspectiva de liberación de la humanidad”.