César Méndez González | Obama, ¡Venezuela no es una amenaza! (Opinión)

En los últimos tiempos las páginas de la historia mundial se han escrito con una altísima carga de violencia e injusticia generada por la arrogancia y ansias de poder de quienes sacaron la mejor parte en la última conflagración mundial iniciada por Adolfo Hitler, un genocida que la humanidad condenará por siempre.

Es larga la lista de invasiones a países indefensos, con evidente menos poderío que Estados Unidos, que han sufrido los atropellos del imperio estadounidense. Basta revisar los ataques militares desproporcionados contra Japón cuando ya estaba rendido, donde por primera vez en la historia se usaron armas atómicas contra las poblaciones civiles de Hiroshima y Nagasaki (6 y 9 de agosto de 1945).

A estos atropellos se suman los ataques a Vietnam, Corea, Guatemala, Panamá, Nicaragua, Haití, Indonesia, Líbano, Libia, Irak, México, Granada y un largo etcétera que causaron la pérdida de millones de vidas humanas, sin contar los destrozos a infraestructuras y patrimonios culturales de la humanidad.

Actualmente, el gobierno presidido por el señor Barack Hussein Obama pretende enfilar sus armas contra el noble y pacífico pueblo venezolano, olvidando que los países latinoamericanos y caribeños rechazan cualquier intento intervencionista y violento, negándose a ser nuevamente el “patio trasero” de Estados Unidos.

Hoy, bajo la égida bolivariana impulsada por el eterno comandante de la Revolución Bolivariana Hugo Chávez Frías, continuada por el presidente obrero Nicolás Maduro, nuestros pueblos se han convertido en punta de lanza contra el imperialismo y la injusticia mundial.

Basados en mentiras, calumnias, manipulaciones mediáticas, sobornos y con un criterio enfermizo que no acepta otra visión de mundo diferente a la que ellos tienen, el Gobierno de EEUU, con el Sr. Obama a la cabeza, emitió el pasado 9 de marzo de 2015 un grosero decreto que pretende ser de carácter extraterritorial, para agredir a un país soberano como la República Bolivariana de Venezuela por el simple hecho de no someterse a sus nefastos intereses.

Ante esta andanada de mentiras y ataques cabe recordar al filósofo y teólogo andaluz Ibn Hazm, quien en el primer siglo DC, en su obra El collar de la paloma, escribió: «No se despeñarían los imperios, ni caerían los reinos, ni se vertería con injusticia la sangre inocente, ni se profanaría lo sagrado, de no ser por las calumnias y la mentira.»

La sociedad venezolana y sus instituciones, con el respaldo de innumerables gobiernos, organizaciones sociales, políticas y culturales y millones de personas en el mundo, han reaccionado contundentemente contra esta amenaza al pueblo y Gobierno venezolanos, exigiendo al Gobierno de Estados Unidos que desista de sus intenciones guerreristas, portadoras de muerte y destrucción, y proceda a derogar de inmediato la “orden ejecutiva” en contra de Venezuela.

¡América Latina y el Caribe es una zona de paz!

¡No a la injerencia yanqui! ¡Venezuela se respeta!

T/ César Méndez González

OBAMA ESTÁS SOLO, Y EEUU LOS GRINGOS FUERA TAMBIEN MIERDAS