Embajador iraní rechazó los señalamientos|OIEA acusó a Irán de no permitir que se vigilen sus actividades nucleares

Ayer, durante la reunión del Organismo Internacional de Energía Atómica, no hubo sorpresas sobre Irán. La semana pasada se divulgó un supuesto informe confidencial de la OIEA que acusaba a ese país de continuar el enriquecimiento de uranio.

En la reunión del Consejo de Gobernadores del ente, que empezó ayer en Viena, su director, el japonés Yukiya Amano, dijo lamentar la decisión iraní de impedir la entrada de inspectores. De acuerdo con AFP, Amano afirmó que “las objeciones reiteradas de los iraníes a la certificación de inspectores que tienen un conocimiento de los ciclos de combustible nuclear y de los sitios de Irán obstaculizan el proceso de inspección”.

Teherán “no ofrece la cooperación necesaria para poder confirmar que todos los materiales nucleares en Irán tengan un uso pacífico”, sostuvo el funcionario, según EFE.

Los inspectores, tal como lo registran versiones de prensa, aseguraron que Irán emprendería experiencias nucleares no declaradas, lo que fue rechazado por el Gobierno de ese país.

“Expreso mi confianza total en el profesionalismo y la imparcialidad de los inspectores”, subrayó Amano. “Ambos conocen el ciclo de combustible nuclear y tienen una larga experiencia en Irán”. Además, anunció que investigará la información suministrada por un grupo opositor iraní de la presunta construcción de una central nuclear secreta.

La nación persa defiende su derecho al desarrollo de la energía nuclear con fines pacíficos, y cuestiona que sean las grandes potencias las que posean esta tecnología y no permitan que otros las utilicen. En consecuencia, el embajador iraní ante el OIEA, Alí Asghar Soltanieh, replicó a Amano. “Rechazo categóricamente la afirmación” de que el veto de esos dos inspectores obstaculice el trabajo de la agencia en Irán.

El funcionario reiteró que el Gobierno iraní está en su derecho de no autorizar inspectores, y ratificó que el organismo puede enviar a otros si así lo desea.

¿POR QUÉ CONTRA IRÁN?

Irán es una “piedrita en el zapato” para Estados Unidos e Israel. El ex presidente cubano, Fidel Castro, ha advertido que las sanciones que el Consejo de Seguridad de la ONU le impuso al pueblo iraní van a desatar un conflicto que se convertirá en una guerra nuclear.

El analista internacional Basem Tajeldine recuerda que, para construir una bomba nuclear, “se necesita un uranio enriquecido a más de 80%; en cambio, el reactor nuclear iraní para obtener electricidad utiliza uranio enriquecido al 20%”. Es decir, en el porcentaje que hasta el Organismo reconoce.

Tajeldine indica que el informe “confidencial” presentado la semana pasada por el OIEA no es casual; al contrario, forma parte de la campaña para que Estados Unidos e Israel “tengan derecho a iniciar la requisición de embarcaciones iraníes”, con las consecuencias ya advertidas por Fidel Castro. “Irán no permitiría que revisen sus embarcaciones porque es un país soberano, que se da a respetar, que tiene gente valiente”.

El Organismo no es independiente, aunque se presente como tal, alerta el analista. “Depende de la Organización de las Naciones Unidas, y Naciones Unidas, particularmente el Consejo de Seguridad, es dirigido por Estados Unidos. No podemos esperar una reacción autónoma y soberana”.

Pareciera “que las cartas están echadas. Igual pasó con Iraq: inventaron mil excusas, supuestas armas de destrucción masiva, y entraron y no encontraron nada. El escenario contra Irán es similar al escenario contra Iraq. Quien no quiera ver la realidad es porque verdaderamente no quiere hacerlo”.

A su juicio, las grandes potencias “tienen un interés económico detrás de estas acciones” contra Irán. “La guerra está declarada en la práctica, pero la fuerza militar de la nación iraní ha logrado detener las intenciones”.

Si hubiese un ataque “Irán tendría el derecho a defenderse, sería una reacción, pero ese país no comenzaría una acción bélica”, asegura, “y ha dejado claro que no es de su interés iniciar un conflicto que afectaría a toda la región y al mundo”.

Estados Unidos e Israel “están jugando a un balance de poder y de influencia política” en el Medio Oriente, evalúa Juan Cole, intelectual estadounidense y comentarista de prensa sobre asuntos del Medio Oriente. La razón es muy sencilla: “dos tercios de las reservas probadas de petróleo y gas natural se hallan en el Golfo Pérsico”.

Israel, acota, “es el poder militar más fuerte en la zona, y la única potencia nuclear”. En caso de que el Estado iraní pudiese elaborar una bomba nuclear, se crearía un desequilibrio regional para los intereses estadounidenses. Por eso el “ataque preventivo”.

La última palabra está en manos del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien -como lo alerta Fidel Castro- apretaría el botón nuclear. Pero también depende, reivindica Tajeldine, de la movilización de los pueblos por la paz.

VENEZUELA SUFRIRÍA LAS CONSECUENCIAS

No por ocurrir lejos de América se libraría Venezuela de las consecuencias de una guerra de mayor intensidad en el Medio Oriente, que involucre a Estados Unidos, Israel e Irán.

“Vivimos en este planeta, somos parte de este planeta. Lo que pase alterará al mundo”, insiste Basem Tajeldine. Pero a las grandes corporaciones mediáticas no les interesa que se sepa el impacto de una confrontación, recalca.

La reunión del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, con expertos en energía atómica, celebrada en agosto pasado, permitió conocer que la Tierra quedaría sumida en un invierno nuclear si se concreta un enfrentamiento.

T/ Vanessa Davies
F/ AFP

Cualquier nación que posee armas atomicas hoy día, sabe que si las emplea contra otra nación que también las posee, la respuesta estara al mismo nivel, de alli que siendo Irán uno de los mayores poseedores de reservar mundiales de petróleo, no se le permita desarrollar la energia nuclear, para evitar que eventualmente puede llegar a fabricar bombas atomicas, que le daria una mayor capacidad de destrucción como respuesta a un ataque por el control de sus riquezas, por los piratas modernos, que han heredaron de los piratas del Imperio Britanico, de la forma en que saqueaban las riquezas del mundo. Un ejemplo es el trato que le dan a la amenaza de Corea del Norte que dice poseer armas atomicas y a Irán que ni siquiera hoy día produce electricidad con el Uranio que posee