El presidente de Perú, Ollanta Humala, indicó este domingo que los peruanos deben sentirse orgullosos de que pasarán al cuarto Gobierno democrático, un hecho sin precedentes en esa nación.
“Eso no tiene precedentes. Es un esfuerzo del pueblo en su conjunto para seguir construyéndonos como país para que se convierta en un modelo de desarrollo y crecimiento”, dijo el actual mandatario tras ejercer su derecho al voto en la segunda vuelta electoral para elegir al nuevo jefe de Estado de Perú.
Cerca de las 09H00 hora local (14H00 GMT), y en compañía de su esposa e hijas, Humala llegó su centro de votación, el colegio Cristo Salvador, en el distrito de Surco.
Asimismo, aseguró sentirse satisfecho por sus cinco años de gestión y agregó que “gobernar cinco años el país es difícil, una tarea en muchos casos incomprendida”.
Seguidamente señaló que el dirigente de esa nación no puede darse «el lujo de ser populista y hacer caso a lo que dice la prensa”, y señaló que se debe gobernar por y para el pueblo.
Respecto a cuál será su camino después del 28 de julio, Humala sostuvo que por ahora se deben “continuar con los grandes proyectos y reformas que van a ayudar a consolidar la democracia. Eso es lo principal, al margen de quién gane este domingo”.
CASO MONTESIONOS
Respecto a la intervención de la celda donde permanece detenido Vladimiro Montesinos, el exasesor de Alberto Fujimori, en la que se encontró un celular, el presidente peruano señaló que es un hecho grave.
“Hay que dejar en claro que vamos a estar celosos de la investigación. Vamos a sancionar a los responsables que han permitido que suceda este acto, empezando por este delincuente”, aseguró.
EN CONTEXTO
Un total de 22 millones 907 mil 954 peruanos están habilitados para sufragar este 5 de junio en la segunda vuelta electoral para definir quién será el jefe de Estado de Perú para el período 2016-2021.
En este país ejercer el derecho al voto es obligatorio y el absentismo está penalizado con una multa.
Politólogos explican que Perú ha vivido en los últimos meses la confrontación entre sectores políticos que apoyan a la hija del exdictador Alberto Fujimori y sectores que prefieren al presidente «débil», representado en Kuczynski.