Organizaciones de derechos humanos y civiles de Guatemala alertaron sobre la posible militarización del país, luego que un grupo de 200 infantes de marina de Estados Unidos comenzó a patrullar esta semana la costa occidental del país centroamericano.
El operativo, en el que participan los militares extranjeros, ocurre bajo el argumento del combate contra el narcotráfico, reseñó la agencia AP.
«Las comunidades rurales en Guatemala están temerosas de que las fuerzas armadas sean utilizadas para combatir a los narcotraficantes, porque las técnicas aplicadas son las mismas que fueron usadas en la guerra» desatada en la década del 80 contra las organizaciones revolucionarias armadas, advirtió Helen Mack, directora de la Fundación de derechos humanos Myrna Mack.
«La memoria histórica está presente y los guatemaltecos están temerosos de eso», añadió.
Kelsey Alford-Jones, directora de la Comisión de Derechos Humanos para Guatemala/USA, recordó que las fuerzas armadas guatemaltecas, que fueron apoyadas por Estados Unidos durante la represión ilegal, cometieron en ese entonces más de 93% de los hechos de violencia en el país.
Los marines estadounidenses comenzaron el operativo junto a unos 250 militares guatemaltecos.
Hace mes y medio Guatemala y la Casa Blanca suscribieron un pacto para autorizar esta operación denominada Martillo.
La última vez que Estados Unidos envió un contingente militar de cantidad significativa a la nación centroamericana fue hace 50 años, con el objetivo de realizar tareas de contrainsurgencia y tras el derrocamiento del presidente Jacobo Arbenz durante un golpe de Estado en el que tuvo una activa participación la Central de Inteligencia Americana (CIA).