Una tenaza aplicaron Simón Bolívar y José de San Martín para derrotar al imperio español en el siglo XIX. Una de las puntas de esa tenaza militar y política la lideraba Bolívar en el norte de América del Sur. La otra punta era obra de San Martín, en el sur del sur. No en vano los dos figuran como los grandes Libertadores (sin escamotear el mérito al cumanés de las victorias, Antonio José de Sucre). Doscientos años después, una argentina, la presidenta Cristina Fernández, será la oradora de orden de las celebraciones por el Bicentenario de la Independencia de Venezuela. “Es el sur de punta a punta”, sentencia Pedro Calzadilla, viceministro de Fomento de la Economía Cultural.
Mañana 19 de abril, de acuerdo con el cronograma de actividades del Ejecutivo Nacional, se llevará a cabo un desfile cívico-militar que durará varias horas y al cual asistirán delegaciones de otros países. Posteriormente, Cristina Fernández le hablará a Venezuela y a América Latina desde la sede de la Asamblea Nacional, en la Sesión Solemne con motivo del Bicentenario. Se espera la asistencia, también, de los mandatarios de Nicaragua, Daniel Ortega; República Dominicana, Leonel Fernández; Bolivia, Evo Morales; Cuba, Raúl Castro; y del primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit.
DE NUEVO, EL SILENCIO MEDIÁTICO
En la nación sureña, la designación de Fernández para ser la protagonista de los festejos en Caracas ha estado sumida en el silencio. El escritor y periodista argentino Luis Bilbao, relata al Correo del Orinoco que en los medios de Buenos Aires, y en los nacionales, “prácticamente no existe. No se dice que viaja a Venezuela, ni que va a ser la oradora de orden”. Esto forma parte, advierte, de la misma campaña de desinformación que sufren Venezuela y otras naciones del continente. “Quienes lo sabemos es porque escuchamos al presidente venezolano, Hugo Chávez”.
En Venezuela, por el contrario, las palabras que pueda pronunciar la Mandataria han generado polémica entre los sectores más conservadores, aun cuando todavía no han salido de su boca. “El Bicentenario no es una conmemoración trivial, y requiere una retórica de trascendencia que valore en términos apropiados y aglutinadores el proceso fundacional del republicanismo venezolano”, declaró a la prensa el historiador Elías Pino Iturrieta.
Pero a las críticas, Calzadilla responde con una sentencia: “Los procesos de Independencia en el continente se libraron en distintas partes simultáneamente; aunque no estaban articulados, era una fuerza histórica común”.
Para las oligarquías que se apoderaron del poder en Venezuela después de la Independencia, “debería ser un venezolano quien hable”, pero la realidad “es que el movimiento liberador fue continental”. Por ello, el investigador no duda en afirmar que este año será la fiesta Nuestroamericana, y la mejor manera de celebrarla es con quienes llevan adelante procesos de defensa de la soberanía en el siglo XXI.
Una suerte de hilo conductor, en opinión de Calzadilla, atravesó todo el continente. Por eso, reitera, “es una decisión maravillosa que la Presidenta sea la oradora de orden. Es una posibilidad de reconocimiento, una reivindicación histórica de lo que ocurrió, una ratificación de ese movimiento liberador”.
En cualquier otro momento, en la llamada Cuarta República, el discurso por el 19 de abril hubiese estado a cargo de un viejo historiador venezolano, ejemplifica Calzadilla. Pero mañana, será una mujer la que empuñará el verbo para la memoria y la acción.
“Cuando alguien analice este capítulo de nuestra historia, dentro de 50 o 100 años, dirá que algo estaba pasando en Venezuela. Pasaba algo tan grande, se habían desajustado tanto las estructuras tradicionales, que la sociedad se permitió colocar a una mujer, una argentina, como oradora central de una fiesta patria”. Esto ratifica, a su juicio, que una revolución está en marcha, “porque algo así sólo ocurre en una revolución”.
Implica, también, una denuncia del pasado en el que las mujeres eran consideradas poco más que unos hermosos adornos sin voz ni voto. “Las mujeres no figuraban en el Cabildo, en los espacios políticos. Ahora, en cambio, ellas son las lideres de buena parte de los procesos de liberación en el continente y en Venezuela”, reflexiona Calzadilla. “En Venezuela, por ejemplo, cuatro de los cinco poderes están dirigidos por mujeres. Por eso es tan importante que la oradora del 19 de abril sea una mujer”.
En Argentina, insiste Luis Bilbao, la responsabilidad concedida a Cristina Fernández impactará positivamente, porque alentará a la gente que piensa que el gobierno de la mandataria es antiimperialista y revolucionario. A su regreso, no obstante, la Presidenta deberá enfrentar una situación política y económica compleja.
DOS HOMBRES, DOS DISCURSOS
El 15 de febrero de 1819, con motivo de la instalación del segundo Congreso Constituyente en la provincia de Guayana, Simón Bolívar pronunció el célebre Discurso de Angostura, publicado por el primer Correo del Orinoco. El Libertador aseveró: “Un gobierno republicano ha sido, es, y debe ser el de Venezuela; sus bases deben ser la soberanía del pueblo, la división de los poderes, la libertad civil, la proscripción de la esclavitud, la abolición de la monarquía y de los privilegios. Necesitamos de la igualdad para refundir, digámoslo así, en un todo, la especie de los hombres, las opiniones políticas y las costumbres públicas”.
El prócer argentino José de San Martín, ante el Congreso Constituyente peruano (la primera institución elegida democráticamente en ese país, en 1822), manifestó: “Al deponer la insignia que caracteriza al Jefe Supremo del Perú, no hice sino cumplir con mis deberes, y con los votos de mi corazón. Si algo tienen que agradecerme los Peruanos, es el ejercicio del supremo poder, que el imperio de las circunstancias me hizo obtener. Hoy que felizmente lo dimito, yo pido al Ser Supremo que conceda a este Congreso el acierto, luces y tino, que necesita para hacer la felicidad de sus representados. ¡¡¡¡Peruanos!!!! Desde este momento queda instalado el Congreso Soberano, y el pueblo resume el poder supremo en todas sus partes”.
En el Discurso de Angostura, Simón Bolívar hizo una sentida exhortación a los legisladores: “Acoger con indulgencias la profesión de mi conciencia política, los últimos votos de mi corazón y los ruegos fervorosos que a nombre del pueblo me atrevo a dirigiros. Dignaos conceder a Venezuela un Gobierno eminentemente popular, eminentemente justo, eminentemente moral, que encadene la opresión, la anarquía y la culpa. Un Gobierno que haga reinar la inocencia, la humanidad y la paz. Un Gobierno que haga triunfar bajo el imperio de leyes inexorables, la igualdad y la libertad”.
En sus máximas, San Martín destacó la necesidad de sacrificarse por la libertad. “Todo buen ciudadano tiene una obligación de sacrificarse por la libertad de su país”, dictaminó. “Mi objeto desde la revolución no ha sido otro que el bien y felicidad de nuestra patria y al mismo tiempo el decoro de su administración”. “Cada gota de sangre americana que se vierte por nuestros disgustos me llega al corazón”. “En el último rincón de la tierra en que me halle estaré pronto a sacrificar mi existencia por la libertad”. “Al americano libre corresponde transmitir a sus hijos la gloria de los que contribuyeron a la restauración de sus derechos”. “Tiempo ha que no me pertenezco a mí mismo, sino a la causa del continente americano”. “Divididos seremos esclavos, unidos estoy seguro que los batiremos: hagamos un esfuerzo de patriotismo, depongamos resentimientos particulares, y concluyamos nuestra obra con honor”.
Y 200 AÑOS DESPUÉS…
“El 19 de abril, hace 200 años, comenzó la jornada de independencia”, destacó el presidente Hugo Chávez el pasado 23 de enero, en los actos por la conmemoración del derrocamiento de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. “Esta misma que aquí estamos nosotros conduciendo, tengamos conciencia de ello, no es que sea esta la segunda, o la tercera, o la cuarta independencia nacional; no, es la mismita que comenzó hace 200 años, pero nosotros, 200 años después, la vamos a concluir. ¡La Independencia de Venezuela!”.
En la columna semanal Las Líneas de Chávez del 4 de abril, el Mandatario nacional recalcó que este 19 de abril es “un día que tiene que ser de fiesta nacional y popular, pero que también debe convertirse en el punto de partida de un gran ejercicio de reflexión colectiva y permanente, durante toda esta Era Bicentenaria que culminará el 17 de diciembre de 2030”.
El líder instó, también, a profundizar la revolución. “A partir de este 19 de Abril todos los venezolanos y venezolanas deben ser convocados no sólo a deliberar, sino también a anticipar el carácter de transformación social profunda y radical que debe tomar, en lo sucesivo, nuestro actual proceso revolucionario en el avance hacia nuestra independencia definitiva, a través de la vía venezolana al socialismo”, sentenció. Mañana, un desfile histórico y las palabras de Cristina Fernández ratificarán la voluntad soberana de América Latina.
AMÉRICA EN PIE
Daniel Ortega
Presidente de Nicaragua. Líder revolucionario del Frente Sandinista para la Liberación Nacional. Pasó varios años en la cárcel por luchar contra la tiranía de Anastasio Somoza. Es uno de los líderes del triunfo de la Revolución Sandinista en 1979. Le tocó combatir a la contrarrevolución financiada por Estados Unidos en la década de 1980.
Leonel Fernández
Presidente de República Dominicana. Abogado. Ingresó al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en 1973, junto al equipo fundador de esa organización, liderado por el profesor Juan Bosch. Dirigió los destinos de su país entre 1996 y 2000. Juró su segundo periodo en 2004, y fue reelecto en 2008.
Cristina Fernández
Presidenta de Argentina. Abogada nacida en La Plata. Fue senadora y diputada. Desde joven se identificó con el Movimiento Justicialista y la lucha por los derechos humanos en su país, acosado por la dictadura de militares de derecha, y de América Latina.
Roosevelt Skerrit
Primer Ministro de Dominica. Miembro del Partido Laborista de su país. Aun cuando Dominica forma parte del Reino Unido, bajo el mando de Skerrit ingresó a la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América. Es uno de los mandatarios más jóvenes del mundo.
Evo Morales
Presidente de Bolivia. Es el primer presidente boliviano indígena, en un país donde la población autóctona es la mayoría. Ganó esta posición en 2005, con las banderas de la nacionalización de los hidrocarburos y la abolición del sistema neoliberal.
Raúl Castro
Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba. Hermano del comandante Fidel Castro, y uno de los dirigentes históricos de la Revolución Cubana.
Otra de CAP
El ex presidente de Venezuela, Carlos Andrés Pérez, divulgó un mensaje a la nación -divulgado ayer por el portal Noticias 24- en el cual dice que hubiese querido enviar un mensaje de celebración, “pero las desgraciadas circunstancias en que nos encontramos me impide hacerlo”.
Pérez, prófugo de la justicia venezolana por la masacre del 27 de febrero de 1989, no escatimó epítetos y acusaciones contra el Mandatario nacional. Incluso, lanzó una advertencia, que podría interpretarse como un llamado al magnicidio o el golpe de Estado: “Ya llegará el momento en que los venezolanos podamos celebrar el rescate de nuestra soberanía, de nuestra dignidad y de nuestras libertades. Ese día seré el primero en celebrarlo”.