El presidente de Ecuador, Rafael Correa, confirmó su asistencia a la Cumbre Iberoamericana de noviembre próximo en Cádiz, aunque abogó por desterrar las agendas triviales que muchas veces caracterizan a esas reuniones.
Queremos que esos encuentros traten temas concretos, trascendentes y urgentes de nuestras regiones, precisó el estadista en una rueda de prensa conjunta con el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, con quien se entrevistó este sábado en Madrid.
Como ejemplo de esos asuntos relevantes a abordar en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará los venideros 16 y 17 de noviembre, Correa mencionó el contencioso de las islas Malvinas entre Argentina y Reino Unido y la lucha contra el narcotráfico.
Insistió en la necesidad de que esas citas abandonen las agendas triviales para no dar la sensación ante nuestros pueblos de que sus presidentes siempre están en cumbres y ellos en el abismo, enfatizó.