La semana pasada Estados Unidos levantó una alerta y cerró embajadas en países del Medio Oriente y de África, por tener información de una supuesta «amenaza terrorista» de Al Qaeda… Me hizo recordar aquella frase sobre la legitimidad y cohesión que genera el miedo, y que usan para justificar en la sociedad internacional el tema del espionaje y de los ataques preventivos, entre otros vicios capitalistas.
Esta justificación fantasma, también me hizo recordar el punto 84 del programa de la MUD que dice literalmente: «Se examinará, por medio de una comisión plural en la que participen diversos sectores de la sociedad, especialmente las ONG, toda la red de servicios de policía política, inteligencia o para-inteligencia que se ha robustecido en los últimos años, evaluando especialmente sus consecuencias sobre el ejercicio de los derechos humanos.» lo que -leyendo lo que no está escrito- supongo que sería para plantear el regreso de las agencias estadounidenses, que el Comandante Eterno erradicó de nuestro territorio hace algún tiempo, donde la lucha por su concepción de los derechos humanos justificaba el espionaje y los métodos tipo Tradición, Familia y Propiedad, para mantener el status quo de otrora.
El imperialismo continúa hilando fino la telaraña hegemónica en la que ha sumido a la comunidad internacional. Titulares hablan de las marchas del fin de semana en Venezuela, como marchas a favor y en contra del Gobierno, sin hablar de que la marcha opositora convocó en apoyo a Richard Mardo -sinónimo de corrupción confesa- y los socialistas convocaron en apoyo a la lucha anticorrupción y a los esfuerzos que está desarrollando en ese sentido, el Gobierno Bolivariano.
Continúa la guerra psicológica contra Venezuela. Senadores gringos sacan proyectos de resolución instando a la OEA a pronunciarse sobre el caso Mardo. Nadie presta atención al programa opositor. Nadie se pregunta cuáles ONG «examinarían» nuestros organismos de inteligencia o para-inteligencia. Tal vez se lo pidan a Samantha Power, a pesar de nuestra Nota de Protesta. Tal vez se planteen el uso del Prism a niveles oficiales. Tal vez sirvan para tapar con un dedo las confesiones de los corruptos. Tal vez inventen células de Al Qaeda en el país.
Pero quedará en tal vez, porque no lograrán que el pueblo venezolano caiga en el juego.