La insurgencia colombiana arribó a 50 años|La violencia del Estado condujo al nacimiento de las FARC y el ELN

El 9 de abril de 1948 en Bogotá fue asesinado Jorge Eliécer Gaitán. Aunque era el máximo dirigente del partido Liberal, en sus arengas pedía que liberales y conservadores se unieran en contra de las dirigencias oligárquicas que los tenían confrontados y empobrecidos. Para demostrar quién había ordenado el asesinato, se expulsó a la delegación diplomática soviética. Casi nadie lo creyó, pero se convirtió en el primer acto político mundial de la llamada “Guerra Fría”. Aun no se sabe el nombre de los responsables intelectuales, aunque todos siguen mirando a la oligarquía bipartidista.

Con el asesinato de Gaitán la violencia partidista existente se multiplicó, principalmente en el campo. Invocada por el gobierno conservador y el clero, la crueldad más extrema cayó sobre liberales y comunistas: A las mujeres embarazadas se les abría el vientre para extraerles la “semilla” enemiga; se les cortaba la cabeza a los hombres para exhibirlas en estacas o jugar al fútbol… Nacía el salvajismo contra la oposición, práctica que no se detiene.

Como la alternativa fue resistir o perecer, los liberales se organizaron en guerrillas. En noviembre de 1949 el ilegal Partido Comunista llamó a la autodefensa de masas. Inmediatamente se entregó a las Fuerzas Armadas los ministerios de Gobierno, Justicia y Guerra. Así los militares, neutros hasta el momento, se vieron lanzados al violento escenario político.

En ese contexto el gobierno envió tropas a Corea, entre mayo de 1951 y octubre de 1954. Fue el único país latinoamericano. Ayudar a combatir al comunismo fue el pretexto. Y de combatir al “comunismo” ya Colombia tenía experiencia. En octubre de 1928 se dictó la Ley de Defensa Social, para impedir “la ola impetuosa y demoledora de las ideas revolucionarias y disolventes de la Rusia del Soviet”. Ese año se utilizó la palabra “subversión” contra una huelga obrera.

Por su participación en Corea, Colombia empezó recibir de Estados Unidos armamento. Este fue estrenado en 1952, en una operación militar inaudita contra los liberales del llano, esa inmensa planicie que hace frontera con Venezuela. Por su actuación, a la policía se le llamó “Gestapo criolla”. Como el operativo fracasó, el gobierno buscó la negociación. Los llaneros aceptaron, pero pidieron tierras, educación y salud gratuitas. Llegó la negativa y el recrudecimiento de la represión. Esas peticiones se salían del marco de la confrontación partidista. Hasta la dirigencia Liberal, que vivía en Bogotá, empezó a desmarcarse: “El gobierno decía que luchaba contra bandoleros, salteadores, malhechores. Y el liberalismo oficial decía que no fueran a confundirlo con esos malandrines”.

COORDINACIÓN NACIONAL

Las élites bipartidistas se sintieron amenazadas cuando los guerrilleros empezaron a coordinarse nacionalmente. Entonces encontraron una solución: el 13 de junio de 1953 le dieron el poder al general Gustavo Rojas Pinilla. El general José Joaquín Matallana, lo explicaría: “El pueblo se iba uniendo en contra del gobierno, la guerrilla crecía cada vez más, y los partidos políticos tradicionales entendieron que por esta vía llegaría el caos a Colombia. Del odio liberal-conservador, estábamos pasando al verdadero problema de la lucha de clases. Entonces surgió una alternativa militar”.

Paradójicamente, Rojas Pinilla empezó a dar a los insurgentes el trato político no dado por los civiles. Les ofreció “Paz, Justicia y Libertad”. El deseo de reconciliación hizo que en tres meses más de 4 mil guerrilleros del llano entregaran las armas. Por todo el país fueron unos 7 mil.

Las guerrillas campesinas al suroccidente del país, lideradas por comunistas y liberales gaitanistas, aceptaron la propuesta de pacificación, pero advirtieron que sin reformas sociales y económicas no dejarían las armas. Les respondieron con más efectivos militares y bandas paramilitares. Los campesinos reactivaron la autodefensa.

Paralalemente, en 1955 se creaba cerca de Bogotá la Escuela de Lanceros, primer centro contrainsurgente de América Latina. Del Fuerte Benning, centro estadounidense especializado en guerra irregular, llegaron los instructores.

El 10 de mayo de 1957 renunció Rojas Pinilla. Inaudito: los patrones obligaron a los trabajadores a realizarle un “Paro Cívico Nacional” para presionarlo. Las dirigencias liberal y conservadora ya habían pactado un acuerdo llamado “Frente Nacional”: cada cuatro años, a partir de 1958, y durante 16 años, se alternarían el gobierno. Los que fomentaron el desangre resurgieron como civilistas, autores del retorno a la democracia. Sus medios de prensa fueron tendiendo un manto de amnesia que los auto-amnistió: Se calcula que entre 1948 y 1958, período conocido como “época de la violencia”, fueron asesinados unos 300 mil colombianos. Y unos 200 mil fueron desplazados de las mejores tierras. Todos pobres.

El primero de enero de 1959 triunfó la Revolución Cubana, sin el apoyo de Moscú o Pekín. El “enemigo” estaba en el mismo patio, por tanto la función de los ejércitos latinoamericanos debía pasar de “defensa del hemisferio”, a la de “seguridad interna”. Había que evitar nuevas Cubas. Para ello el gobierno de John F. Kennedy impuso la Doctrina de Seguridad Nacional (DSN). Esta englobaba toda una variante de metodologías contrainsurgentes contra el “enemigo interno”.

Como se trataba de seguridad nacional, a las Fuerzas Armadas latinoamericanas se les fue trasladando, directa o indirectamente, el poder político. Por tanto necesitaban un adiestramiento militar e ideológico diferentes, el que se les empezó a dar masivamente desde 1962 en la Escuela de las Américas, centro de adoctrinamiento estadounidense instalado en la zona del canal de Panamá. Desde el primer momento los militares colombianos estuvieron entre los más numerosos.

MARQUETALIA

A comienzos de los años 70 los campesinos del suroccidente del país persistían en resistir. Como parte de la DSN, por primera vez en el continente se aplicó la Acción Cívico-Militar (ACM). Se pretendió mostrar a militares y policías como entes de utilidad social, que trabajaban mano a mano con el pueblo. Ganar corazones y mentes al comunismo era uno de sus objetivos. El otro era colectar información de inteligencia. Por su dinámica, la ACM permitió a las Fuerzas Armadas ser parte de los ministerios de Agricultura, Obras Públicas, Salud y Educación. En 1962 se decidió que los militares enfrentaran todo tipo de protesta social. Así se fue instalando un estado militarizado, sin que se llamara dictadura.

El 27 de mayo de 1964 se lanzó una inmensa acción militar contra los campesinos “bandoleros” del suroccidente del país: la Operación Marquetalia. Ya la ACM había hecho su parte. Como otro método contrainsurgente se implementó la guerra sicológica. En la radio, y por todo el país, se escucharon informaciones que creaban zozobra y rabia contra esos campesinos. Encabezados por los veteranos de Corea, y los egresados de las escuelas de Lanceros y de las Américas, 16 mil soldados cercaron una extensa región. Contaban con el asesoramiento estadounidense, y su poderoso armamento. Una demostración de fuerza, acompañada de la histeria desinformativa, para agredir a un grupo de 52 hombres y 3 mujeres mal armado.

Jaime Guaracas, uno de los que participó en la defensa de las regiones, contó: “Ninguno de nosotros tenía experiencia militar. Ni sabíamos qué tipo de ejército íbamos a enfrentar. Había dos reservistas, pero no sabían técnicas de combate”. El grupo adoptó la guerra de guerrillas: Unidades en movimiento permanente que evitaban la confrontación, y que atacaban por sorpresa. Así nació, en ese día de mayo, la organización que dos años después se llamaría Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El 4 de julio, cuando la “Operación Marquetalia” arreciaba, al nororiente del país 18 hombres creaban otra guerrilla. Era uno de los “efectos” de la Revolución Cubana. “Siete jóvenes colombianos que habían adquirido formación ideológica y militar en Cuba, regresaron al país para crear al Ejército de Liberación Nacional (ELN). Esta no actuó como las autodefensas campesinas, que se dedicaban a defender una zona: su lucha sería por la toma del poder”.

El ELN trató de no caer en la pugna ideológica chino-soviética que vivía la casi totalidad de izquierda en el mundo. Confrontación que se dio al interior del Partido Comunista colombiano. Unos de sus cuadros rompieron para crear el Partido Comunista de Colombia, Marxista-Leninista. Eran los prochinos o maoístas. También fue en 1964. Tres años después formarían al Ejército Popular de Liberación (EPL). Igualmente pretendían la toma del poder.

Después de 50 años estas organizaciones revolucionarias están presentes en todo el país, principalmente las FARC y el ELN. Al iniciarse la Operación Marquetalia, el presidente Guillermo León Valencia aseguró lo que todos sus sucesores, sin excepción, repetirían: “Mucho antes de que termine mi gobierno el país estará totalmente pacificado”. La realidad es que las condiciones que llevaron a su conformación, tanto sociales, económicas, políticas como de represión, se han incrementado. Mientras que Washington decide hoy más que nunca en la vida de los colombianos, sin dejar de atizar la guerra.

T/ Hernando Calvo Ospina
F/ Cortesía

ES LA MISMA QUE OCURRIRIA EN VENEZUELA DE LLEGAR AL PODER ESA OLKIGARQUIA QUE SE VALE DE PERSONAJES COMO LOS QUE REPRESENTARON LA CUARTA REPUBLICA. NADIE DEBE OLVIDAR LOS ASESINATOS LA REPRESION DESAPARICIONES Y TORTURADOS DE ESA NEFASTA EPOCA. LOS QUE CREEN EN PAJARITOS PREÑADOS QUE LES PINTA LA OPOSICION SON UNOS ILUSOS. TODOS SON LOS MISMOS. PERO AHORA LOS ACOMPAÑA EL ODIO, EL CARADURISM,O Y EL CINISMO. ESE ODIO ES VICERAL. SE LES NOTA EN LA MIRADA DE CUALQUIERA DE ELLOS. DESDE LOS REPRESENTANTES DE LA MUD HASTA EL MAS DESVENCIJADO DE LAS MARCHAS QUE HACEN, QUE NO LLEVAN IDEOLOGIAS DE PATRIA SI NO. EL ODIO. HASTA EN LA FORMA DE CAMINAR. ES INCREIBLE COMO EXTERIORIZAN EL DESPRECIO HACIA LOS POBRES. A TODO A ,LO QUE NO SEA DE LO QUE ELLOS CREEN QUE ES SU ABOLENGO, PARASITARIO QUE TODO SE LO MERECE, AUNQUE EL QUE MAS O EL QUE MENOS, PROCEDEN DE DE LA MISMA GENTE A LA QUE DESPRECIAN. POR ESO HUYEN DEL PASADO QUE LES DA PIQUIÑA Y SON CAPACES DE CUALQUIER ABERRACION CONTRA LA PATRIA

  • Aún sigue gobernando la oligarquía, esta lucha interna a obligado a muchos colombianos a emigrar, tal vez sea los colombianos los mayores desplazados de América, y el gobierno esto parece no importarle.

  • La oligarquía sigue gobernando a Colombia. Siguen engañando al pueblo y los q pueden dejan su País y aventuran por el mundo, tal vez sea Colombia el país de América con mayor número de desplazados.