El presidente de la República, Nicolás Maduro, encabeza este viernes la Conferencia Internacional Colonialismo, Neocolonialismo y los Despojos Territoriales del Imperialismo Occidental, realizada en la Casa Amarilla, sede de la Cancillería en Caracas.
El encuentro reunió a autoridades del Gobierno Bolivariano junto al primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, así como delegaciones de Ásia, América Latina y El Caribe, África, Europa, América del Norte, entre otros.
En su intervención, el presidente Maduro reafirmó que, frente a las amenazas imperiales, Venezuela practica una diplomacia de paz con experiencia y firmeza, destinada a preservar la dignidad de los pueblos.
Cuestionó la validez moral y jurídica del laudo arbitral de París, que —aseguró— fue “cocinado” por potencias externas y por ello lo calificó como «nulo e írrito para todos los tiempos»; una decisión que refleja viejas artimañas del imperialismo británico y de intereses codiciosos vinculados a Estados Unidos.
Maduro reivindicó además el legado de las grandes revoluciones anticoloniales y figuras imprescindibles de nuestra historia como Haití, Simón Bolívar y Francisco de Miranda, cuyo ejemplo —dijo— inspira la resistencia y la unidad regional.
Reiteró además que Venezuela defenderá el proyecto original de la patria “por encima de cualquier circunstancia” y que la nación no renunciará a su soberanía ni a su derecho de autodeterminación.
“Venezuela jamás se arrodillará ante ningún imperio, por muy poderoso que sea; le daremos en su justa medida una lección moral, política y ética”, subrayó el jefe de Estado, al tiempo que llamó a la región a consolidar la unidad frente a las nuevas formas de despojo y a profundizar una agenda de cooperación que garantice la paz, la justicia y el respeto a la soberanía de los pueblos.
Por su parte, el canciller Yván Gil destacó que la cita congregó a representantes de 59 países en dos días de trabajo, a través de 25 paneles que abordaron la vigencia de las prácticas coloniales y neocoloniales.
A su vez, la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez, subrayó que este foro se convirtió en espacio de reflexión académica y política con una consigna clara: “abajo el hegemonismo imperialista, causante de destrucción y muerte”.
Asimismo, denunció que la coyuntura actual en el Caribe ha sido aprovechada por Guyana para abrir las puertas a la injerencia de Estados Unidos.
El primer ministro Ralph Gonsalves, invitado especial, repudió la desproporcionada ofensiva israelí contra la población civil en Gaza, al tiempo que abogó por consolidar al Caribe como zona de paz.
Propuso además avanzar en reglas comerciales justas, acciones conjuntas frente al cambio climático, la proliferación de armas nucleares y los desafíos que plantea la inteligencia artificial.
Con este foro, Venezuela y sus aliados consolidan un espacio de articulación internacional que eleva la voz de los pueblos frente a los despojos históricos y las nuevas formas de dominación, reafirmando la necesidad de un mundo multipolar basado en la paz, la cooperación y el respeto a la soberanía de las naciones.